Espejos

ACRE, ISRAEL.- Alguien espía por encima de mi hombro y sintetiza el sentimiento colectivo: somos los argentinos lanzándonos al vacío. No hay que explicarle a ningún compatriota o extranjero atento a los hechos de estas horas el sentido de esa broma. La imagen, que no puede ser más elocuente, tiene dos lecturas posibles: los hombre en la fila, que están a punto de despeñarse en el abismo, son los argentinos o es el país, que con tan obstinada frecuencia cae entre las llamas del Infierno de Dante. La escena que tenemos delante captura una costumbre celebrada en Israel, según la cual el...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR