Escondido en Palermo Viejo: un bar con aires de Belle Époque, la leyenda del hijo de María Antonieta y 3 propuestas diferentes

La fachada de la casona de 1927 en el pasaje entre Santa Fé y Güemes

Entre la bulliciosa Avenida Santa Fe y la calle Güemes, en Palermo Viejo, se encuentra un elegante y tranquilo pasaje con varias casonas que recuerdan los espléndidos años dorados de la Belle Époque . Entre ellas, hay una, que data del año 1927, que es una verdadera joya arquitectónica: con una imponente fachada con portón de madera, escudo señorial e iluminados vitraux de sello francés. Detrás, se esconde "Anasagasti", un bar con cócteles de autor y platos con alto vuelo, que acaba de reabrir sus puertas. Su nombre está inspirado en la coqueta calle porteña donde está situado.

La cuidada decoración traslada a otros tiempos

Un pasaje con aires de Belle Époque y una casa con historia

La historia de Anasagasti comienza a mediados del 2016. Ese año, Nicolás Garófalo, junto con su amigo Nicolás Pastore, soñaban con la idea de abrir su primer emprendimiento gastronómico propio. Tras patear el barrio, en busca del local ideal, descubrieron una antigua casona y se enamoraron inmediatamente. Es que cuando traspasaron aquella puerta de roble, se vieron cautivados con la belleza de su interior. "Encontrar en pleno centro de la ciudad una calle con tanta tranquilidad, calidez y elegancia nos pareció algo único. Reflejaba lo que queríamos transmitir con nuestro proyecto: una propuesta de calidad, donde nuestros invitados puedan compartir momentos únicos y siempre se sientan bienvenidos. Es por ello, que nunca dudamos en utilizar el nombre del pasaje para titular nuestro proyecto", afirma a LA NACIÓN Garófalo, socio y gerente del bar.

Los detalles fueron cuidados en todos los rincones y en muchos casos refieren a los tragos

También los cautivó la historia del lugar. "La casa fue construida por el arquitecto y urbanista Pedro Benoit , nieto de Pierre Benoit, quien se dice sería el hijo de María Antonieta y Luis XVI. Según cuenta la familia Zapiola (descendientes de Pierre), el hijo de María Antonieta y Luis XVI no fue asesinado, sino que habría escapado hacia Argentina, para vivir bajo el nombre de Pierre Benoit", asegura el emprendedor. Entusiasmados tomaron la decisión de reformarla, pero sin que perdiera su esencia y porte colonial. En esta búsqueda se conservó al máximo su estética; entre ellas las aberturas originales, pisos de roble de Eslovenia y pinotea, chimenea, maderas talladas en la escalera e imponentes vitraux. "El proceso de remodelación fue largo, ya que cuidamos cada...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR