Un error lo tiene cualquiera; tolerancia, no

Un delantero cualquiera yerra un gol insólito en un partido. A la fecha siguiente le sucede lo mismo. Y pueden pasar varios encuentros desperdiciando ocasión tras ocasión. El técnico dirá algo así como: "Lo bancamos. Sabemos que está en un mal momento pero ya le cambiará la racha. Trabaja muy bien en la semana".Un director técnico cualquiera recibe muchas críticas del periodismo y de los hinchas de su equipo. Lo objetan por sus planteos, por sus cambios durante los partidos y, especialmente, por los malos resultados. Resistirá en su puesto varias fechas, pero finalmente deberá irse. Es cierto que la paciencia del fútbol con los entrenadores es poca y que la mayoría de las veces no se cumplen los contratos, tan cierto como que reciben más oportunidades que otros protagonistas del fútbol.Los presidentes de los clubes argentinos han sido grandes protagonistas del caos que se vive en nuestro fútbol. Sin realizar acusaciones de corrupción (aunque encuadra en muchos casos), sobran ejemplos de entidades fundidas por los desgobiernos de esos dirigentes que dicen amar a su club. Y ellos cumplirán su mandato de varios años para después seguir con sus vidas como si nada, mientras el club cuenta centavo por centavo para tratar de...