Ellerstina, cada vez mejor: conquistó el Abierto de Hurlingham y llega entonado a Palermo

Así las cosas, da la impresión de que debe aparecer La Dolfina entero para que este Ellerstina pueda no ganar todo lo que se propone. El cuarteto de los Pieres e Hilario Ulloa tiene alguno que otro bache en los partidos, como todo equipo deportivo, pero en la suma es claramente superior al rival de turno. En este particular 2020 nada lo frena por ahora y la Z ya levantó dos copas: con un 16-11 sobre RS Murus Sanctus en el predio de Pilar de la Asociación Argentina de Polo, conquistó el Abierto de Hurlingham, y por cuarta vez en los últimos cinco años se tomó la foto con los sacos de campeón y la copa The Ayrshire en el podio.Y como nunca después de 2010, cuando tenía otra formación, Ellerstina llega como favorito al Campeonato Argentino Abierto, que comenzará el próximo sábado y se desarrollará seguramente ya con algo de público. Tiene sanos a sus cuatro jugadores, está en un ritmo alto, gana confianza, funcionan sus caballos, mezcla solidez y buen juego y no siente como un cuerpo extraño a Ulloa, incorporado este año. Otras veces aparecía Palermo y el conjunto de General Rodríguez todavía dudaba de quiénes debían jugar en ciertos puestos; ahora no sólo tiene en claro eso, sino que además compartirá una zona, la B, bastante menos riesgosa y exigente que la otra.Compacto de Ellerstina vs. RS Murus Sanctus, final de HurlinghamSobre todo, si juega como este domingo. El medio chukker inicial de dominio de Murus Sanctus en la cancha 1 del predio Alfredo Lalor no fue un prolegómeno del partido. La Z se puso en seguida en juego y con un par de minutos en altas revoluciones estampó un 4-2. Y siguió.Anticipación a las jugadas, backhanders a compañeros, juego simple, buen taqueo y defensa a presión lo hicieron escaparse a 9-4. Con un medio más equilibrado, Facundo Pieres puede dedicarse a lo que hace un número 1 en el polo: conseguir goles. Parece redundante decirlo, pero el delantero ahora juega claramente adelante y aprovecha su velocidad y su taqueo para anotar con huidas o con remates largos. Sólo le faltó algo de precisión en algunos tiros, que habrían sido golazos. Pero no es poco lo que hizo: siete tantos de bocha viva, más tres penales. Y además se lució con dos actitudes de caballerosidad: reconoció inmediatamente como desviados dos tiros suyos que un mismo banderillero había marcado como goles, en diversos chukkers.En la final de...