La economía, muy atenta al resultado

El Gobierno cree que la economía llega a las PASO en un estado de buena salud, que se reforzará para los comicios en octubre, más allá de la histeria financiera de corto plazo que pueda generar un eventual triunfo hoy del kirchnerismo en la provincia de Buenos Aires.

Con casi todos los indicadores oficiales en terreno positivo, el ánimo oficial es mejor que hace unos meses, aunque el equipo económico reconoce que la reactivación en el territorio más fuerte para la ex presidenta Cristina Kirchner resulta más lenta que en otras zonas.

Una calificada fuente de la cartera que conduce Nicolás Dujovne asegura que la economía creció más del 2 por ciento en el segundo trimestre y que crecerá el 1,5 por ciento en el tercero, a las puertas de las elecciones de octubre. Esto significaría, si se cumpliera la previsión oficial, que la economía estaría creciendo al 6 por ciento en términos interanuales. "Ni Alfonsín tuvo esta tasa en las elecciones de 1985", se jactó la fuente.

La crítica generalizada respecto de que "el crecimiento todavía no se siente en la calle" no hace mella en la confianza del Palacio de Hacienda, donde se defienden con el crecimiento del empleo y del salario real de los últimos meses, por encima de la inflación. "Cada mes la gente está un poco mejor", aseguran frente a la Casa de Gobierno.

Más cautela hay, claro está, respecto del estatus en el bastión del kirchnerismo, el conurbano, donde "había muchos anabólicos hasta 2015 y es difícil, no tanto la reactivación de corto plazo, sino una salida con crecimiento en el mediano plazo", según el funcionario.

Por esta razón, reconocen que si hoy el oficialismo sale bien parado en la provincia, el resultado ayudará a que el crecimiento económico se acelere, porque no habría tanta tensión en el mercado cambiario. De este modo, el...