Dos maneras de decir flamenco

JOAQUÍN CORTÉSA los 43 años y con siete espectáculos en su haber, Joaquín Cortés se transformó en un fenómeno de masas, una suerte de Nureyev flamenco que revolucionó su tiempo y transformó ese estilo ancestral, que dejaba atrás la intimidad, la solemnidad teatral y cierto aire de misa, para llevarlo al show para estadios. Cortés dice, con la irreverencia de genio que llegó a bailar con Maya Plisetskaya, que cambió la danza del siglo XX. "Soy un pionero y un visionario, pero hace veinte años pensaban que era un rebelde sin causa porque bailaba con el torso desnudo, llevaba el pelo largo o me ponía una falda. Hoy esas cosas son de lo más normal del mundo en un montón de compañías. Los puristas que me criticaban ahora imitan mi estilo. Al final, me han dado la razón", se jacta del otro lado de la línea en Madrid el moderno bailaor gaditano, que vendrá a presentar su último espectáculo Calé, una retrospectiva con cuadros de distintas obras, mañana en el Luna Park. Es el bailaor quien devela las claves de su personalidad en primera persona.fusión."El estilo Joaquín Cortés surge de fusionar diferentes elementos. Hay una base que es de ballet clásico con flamenco y después vienen la contemporánea y la danza española. Fue un estilo que nació de forma natural porque de pequeño tuve la suerte de cultivarme en todo tipo de danza. Normalmente siempre te dicen que está todo establecido, ya no hay cosas nuevas y, de pronto, aparece alguien con frescura, rebeldía y con ganas de hacer algo distinto a lo establecido. Ese fui yo."fenómeno."Cuando monté Pasión gitana, se mezcló un gran diseñador de moda como Giorgio Armani, un Joaquín Cortés que había explotado en España y una producción al estilo rocanrol, que era con una puesta de luces y un sonido...