La Dolfina se blindó y es finalista

La Dolfina vs. Ellerstina. Ellerstina vs. La Dolfina. En los últimos años, la Triple Corona casi no sale de eso como cruce de finales. Mérito de esos dos equipazos, seguro. Y falla de una segunda línea de formaciones que no alcanzan a dar el salto más que esporádicamente. Ellerstina tiene muy buenos polistas y una caballada inigualable, por cantidad de calidad. La Dolfina posee a Adolfo Cambiaso y, en 2011, unos compañeros que hacen que se hable de dream team . Tanto que, sin uno de esos jugadorazos, ha salido indemne de un examen dificilísimo: el siempre exigente La Aguada.En la definición de la zona A del Abierto de Tortugas por el Gran Premio Audi, La Dolfina Dubai doblegó a La Aguada BMW por 10 a 9 y accedió al choque decisivo del primer abierto grande de la temporada, partido que protagonizará el próximo sábado frente a su archirrival, ganador del grupo B. Por ende, el club de Cañuelas vuelve al desenlace de Tortugas al cabo de seis años; en 2005 lo perdió ante... Ellerstina.Múltiples fracturas en la nariz hicieron que Pablo Mac Donough mirara el encuentro en los palenques de La Dolfina, que pasó de 39 a 37 de handicap con el ingreso de Lucas James. Más allá de que el joven trenquelauquense formó como Nº 3 y el conjunto no debió mover de posiciones a sus integrantes, La Dolfina se resintió más que los dos goles que resignó, porque un suplente con caballos ajenos no suele rendir en proporción a un titular con montados propios. Pero el cuarteto blanco lo resolvió bien. Cambiaso se involucró mucho más en el medio juego que en su debut (17-9 sobre Pilará), para dar una mano en la recuperación y en la gestación. Y Juan Martín Nero volvió a tener otro alto desempeño, con su seguridad defensiva y su contribución como conductor desde el fondo.Hay que decir, también, que 60% de los goles de La Dolfina fue de penal. Responsabilidad de La Aguada, que cometió algunas infracciones por demás evitables; dos fueron frente a su arco, en rechazos, y costaron dos penales de lugar, o sea, dos tantos. En cambio, los Novillo Astrada marcaron de jugada ocho de sus nueve goles. Una mitad de ellos fue en su excelente quinto chukker (4-0), cuando avasallaron con concentración y caballada. Pero en muchos otros pasajes de un partido cambiante (tuvo cuatro alternancias de dominador del resultado) fue traicionado bien por un taqueo errático en velocidad o bien por jugar un polo lento, de trencito, demasiado indirecto hacia los mimbres...

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