Un día inolvidable para Singapur

La isla de Sentosa significa "paz y tranquilidad", y sin embargo, años atrás, fue todo menos eso. El lugar, hoy un paraíso para los muchos turistas que lo visitan, funcionó como campo de prisioneros de guerra de Japón para militares británicos y australianos tras la rendición de las fuerzas aliadas en 1942. También aquí se llevaron a cabo ejecuciones sumarias de un gran número de chinos, sospechosos de estar involucrados en actividades antijaponesas.

El presidente norteamericano cumple 72 años pasado mañana y el gobierno de Singapur no quiso perder oportunidad para agasajar a un hombre difícil de complacer. Durante la reunión con el primer ministro del país anfitrión, Lee Hsien Loong, Trump recibió una torta como regalo adelantado, según una foto que publicó en Facebook el ministro de Asuntos Exteriores local, Vivian Balakrishnan, en la que se ve al mandatario con el secretario de Estado, Mike Pompeo, y el jefe de gabinete, John Kelly.

El dictador norcoreano suele moverse en un marco de máximo hermetismo, pero ayer cambió su estilo. Kim dejó sorpresivamente la suite presidencial de 300 metros cuadrados en el Hotel St. Regis antes de acostarse para la Cumbre y protagonizó un sorpresivo city tour, entre selfies, saludos y aplausos de los peatones. Con un largo cortejo de autos visitó los Jardines de la Bahía y subió a un mirador de 50 metros, en compañía de su hermana Kim Yo-Jong y otros funcionarios de la delegación.

Uno de los pocos occidentales que fue recibido por Kim Jong-un, la excéntrica exestrella de la NBA Dennis Rodman, estuvo presente en Singapur. Rodman le...