Un desafío para la ciencia y la medicina

A medida que, ayer, avanzaba la tarde, crecían las expectativas sobre el nuevo campo de trabajo para la ciencia y la medicina locales que abriría la inminente sanción de la ley sobre el uso medicinal del cannabis. Todo un desafío, si se tiene en cuenta que la planta aún esconde más enigmas que certezas sobre sus efectos para la salud humana.

En las seis páginas del proyecto aprobado para regular "la investigación médica y científica" de la marihuana, el Ministerio de Salud de la Nación queda a cargo del programa en el que trabajarán juntos el Conicet y el INTA. También lo harán los pacientes que se inscriban para acceder de manera controlada al tratamiento de la epilepsia resistente a las terapias disponibles, el dolor crónico o síntomas del cáncer, entre otros problemas.

"Salir de una situación de prohibición de una sustancia para tantas patologías que en muchos países ya se usan de forma legal pone a la Argentina en una situación inédita en la que hay que trabajar para ganar terreno. El número de enfermedades que responden a distintas composiciones farmacéuticas del cannabis crece semana a semana", dijo Marcelo Rubinstein, investigador del Conicet y profesor de la Facultad de Ciencias Exactas y Naturales de la UBA.

En diálogo con LA NACION, ayer, después de la aprobación de la ley, afirmó que es "una oportunidad tremenda" y "un gran desafío" sin antecedentes en el sistema científico local.

Hay que crear grupos de investigación, multidisciplinarios y con otro grado de financiamiento -enumeró-. También hay temas para estudiar con un futuro enorme. Es un despertar único en la ciencia de un país como el nuestro. Va a haber trabajo para farmacólogos, inmunólogos...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR