Por cuestiones económicas, el ATP de Buenos Aires podría sufrir varios cambios

NUEVA YORK (De un enviado especial).- Los Grand Slam no sólo son los certámenes que más puntos reparten en el circuito. Durante las dos semanas de competencia, la periferia del juego tiene una vida muy activa. Es decir, que además de los tenistas y de sus grupos de trabajo, ex jugadores, managers y empresarios de distintas firmas multinacionales se citan en los Majors para planificar futuros negocios. Y desde principios de esta semana, en los pasillos de Flushing Meadows circuló una fuerte versión: que el ATP porteño estaría a la venta y que en los próximos tiempos podría cambiar de dueño, ya que a los propietarios actuales se les está haciendo muy complejo mantener en pie el certamen.Es más: la cifra para adquirir la franquicia -la semana de competencia tiene como dueño exclusivo a la ATP- sería de unos 3.000.000 de dólares, según estimaron por aquí varios conocedores del circuito profesional. La difícil situación económica de la Argentina y las trabas para obtener dólares generan que la llegada de tenistas extranjeros al país sea una tarea muy espinosa. Para los organizadores, ante ese panorama y las tentaciones que esa misma semana puede ofrecer un ATP en Europa, se les hace muy complicado buscar atracciones para el público porteño: la última versión de la prueba, conquistada por el español David Ferrer, fue la segunda con menor público en la historia del torneo desde que se recuperó la fecha en 2001, con un total de 45.616 espectadores. La de menor convocatoria fue la de 2002, en medio de la crisis económica y social que azotó a nuestro país, con 35.569 personas.Juan Mónaco, David Nalbandian, Ferrer, Nicolás Almagro y Stanislas Wawrinka fueron algunas de las principales figuras del certamen durante los últimos años, pero el público, evidentemente, necesita más estímulos. Este año hubo charlas con Rafael Nadal, que tras una larga inactividad decidió dar sus primeros pasos en el polvo de ladrillo latino; finalmente, el mallorquín no pisó Buenos Aires, pero las autoridades del certamen bonaerense sueñan con que Rafa llegue en 2014.De todos modos, y a propósito de Nadal, el ATP porteño ha encontrado un fuerte adversario en las exhibiciones de fin de año; el éxito que cosechó la llegada de Roger Federer a nuestro país derivó en la llegada de otras estrellas. Nadal ya tiene confirmadas al menos dos exhibiciones en la Argentina: el 21 de noviembre, en el Orfeo Superdomo de Córdoba, frente a David Nalbandian; dos días después, nuevamente ante el unquillense...