La cuenta regresiva y las chances: River en Japón

Con el vuelo del plantel también viajó la ilusión de los hinchas. La espera por el Mundial de Clubes, en Japón, empezó la cuenta regresiva para River. Es el tiempo de los pronósticos, las conjeturas, la presunción y la sospecha sobre las posibilidades del equipo que dirige Marcelo Gallardo en la primera experiencia de los millonarios en el certamen intercontinental. Imposible, entonces, no imaginar o proyectar una final con Barcelona, la estructura que dejó un sello en la historia del fútbol, pero que no se detiene y se sigue reinventando para sumar trofeos a sus atiborradas vitrinas. Es la idealización de todos: medirse con el mejor del planeta, a un partido. Una situación en la que el resultado le puede provocar una sonrisa al conjunto de menos estrellas, de valoración más ajustada en el mercado, pero que desde ese momento pasarán a ser leyendas. Pero es demasiado temprano para adentrarse en un encuentro que recién se desarrollaría el 20 de diciembre, en el estadio Internacional de Yokohama, esa funcional y moderna instalación que terminó de construirse en 1997. Un escenario acostumbrado a albergar cotejos decisivos, donde se consagra a un campeón: la final de la Copa del Mundo de Corea-Japón, en 2002, entre Brasil y Alemania lo tuvo como sede; también se coronaron ahí quienes levantaron el trofeo del Mundial de Clubes en 2005, 2007, 2008, 2011 y 2012.

Pero antes de imaginar y jugar en la cabeza ese ansiado partido, River tiene una escala obligatoria en Osaka, una ciudad que le resulta amigable, ya que el 8 de agosto pasado, ahí derrotó 3-0 a Gamba Osaka y se alzó con la Suruga Bank. Los millonarios deberán resolver en ahí el pasaje al partido decisivo en Yokohama, ya que un tropiezo lo dejaría vacío en lo deportivo, con el espíritu desconsolado, mientras que la tesorería dejaría de percibir 1.200.000 dólares, más allá del resultado de la final. Las semifinales resultaron un partido incómodo para los tres clubes argentinos que ya tuvieron participación en la Mundial de Clubes: Boca apenas superó 1-0 a Étoile du Shael, de Túnez, en 2007; dos años más tarde, Estudiantes debió esforzarse para imponerse 2-1 a Pohaeng Steelers, de Corea del Sur, mientras que San Lorenzo, el año pasado, debió recurrir al tiempo suplementario para quitarse de encima, por 2-1, a Auckland City.

Todavía River desconoce quién será su rival en las semifinales, una instancia a la que podrían acceder tres equipos: Auckland City, de Nueva Zelanda, uno de los históricos...