Crece el escándalo en el Inadi

No cesa el fuego cruzado y, lejos de apaciguarse la guerra, cada día aparecen nuevas de denuncias sobre ñoquis, malos tratos y maniobras sospechosas en el Instituto Nacional contra la Discriminación, la Xenofobia y el Racismo (Inadi).Ayer, al mediodía, el ex presidente del organismo Claudio Morgado ratificó su acusación en contra su entonces segunda, María Rachid, ante el juzgado federal a cargo de Ariel Lijo. Ella, caída la noche, llevó una pila de expedientes con presuntas irregularidades a la Oficina Anticorrupción.En su paso por Tribunales, el ex conductor de TV aportó, además, una serie de documentos para respaldar sus dichos, según confiaron a La Nacion fuentes judiciales.Lo más curioso fue una lista de 40 empleados designados por la actual candidata a legisladora porteña por el Frente para la Victoria y considerados irregulares por Morgado. Allí aparecen, por ejemplo, Mercedes Rachid, con fecha de ingreso en marzo pasado y un sueldo de $ 4200. Se trata de la hermana de la ex vice, que oficiaba de secretaria privada.También se destaca en esa grilla el militante barrial kirchnerista Alejandro David Salvatierra, contratado desde febrero y con un saldo inicial de $ 2100. Al poco tiempo tuvo un incremento que alcanzó los $ 4200. Este último, más conocido como "Pitu", cobró notoriedad durante la toma del Parque Indoamericano, que desató durante el verano una crisis entre las gestiones de Cristina Kirchner y del jefe de gobierno porteño, Mauricio Macri.Desde el entorno de Rachid reivindican cada nombramiento y niegan que tengan visos de ilegalidad. Son, según argumentan, locaciones de servicios que corresponden a un convenio con la Universidad de Buenos Aires.También desestiman la veintena de denuncias por presunto maltrato que elevó Morgado a la Justicia. Una de ellas fue formulada por referentes del "Programa de la Comunidad Sorda". Allí acusan a la mujer y al director del Inadi Emiliano Ramírez de llevar adelante una "política basada en la mentira, el control, la persecución, el desprestigio y el abuso de poder". En otra misiva -firmada por empleados del Inadi y asociaciones de lucha contra la droga, el sida, entre otros- denuncian "aprietes" y la evocación de Rachid al nombre del jefe de Gabinete, Aníbal Fernández, como amparo de sus acciones. En rigor, la titular de la Federación de Lesbianas, Gays, Trans y Bisexuales fue escalando en el poder de la mano del ministro coordinador."Rachid quería un golpe institucional", lanzó Morgado, antes de entrar a...