'Convertimos un desierto en un paraíso, ¿será posible hacerlo a nivel global?'

La Hacienda Bulcão tras la reforestación de toda la zona

El brasileño Sebastião Salgado , de 78 años, tuvo varias vidas y en todas fue exitoso. Por un lado, se doctoró en Economía en París y luego trabajó en Londres en la Organización Internacional del Café y en el Banco Mundial. También fue fotorreportero multipremiado , y más tarde documentalista que llegó a filmar junto al famoso director de cine alemán Wim Wenders. Pero, además, en 1994 una enfermedad lo forzó a frenar el ritmo y dar otro giro en su vida.

"Heredé la hacienda familiar de mi infancia en Minas Gerais, que estaba tan enferma como yo en aquel momento . Todo había sido arrasado por la deforestación, solo un 0,5% de la tierra tenía árboles . Pero en estos casi treinta años, junto a mi esposa convertimos un desierto en un paraíso con tres millones de árboles y el retorno de más de 200 especies animales que habían desaparecido del lugar . Me pregunto si esta experiencia se puede replicar a nivel global ", dijo Salgado a LA NACION.

Sebastião Salgado, el multipremiado fotorreportero brasileño

Con muchísimos premios en su haber, Salgado fue reconocido en 1998 con el Príncipe de Asturias de las Artes por su vasta trayectoria fotográfica, porque "ha sabido retratar la condición humana y evidenciar las desigualdades del mundo actual ".

Entre sus obras, una de las más reconocidas fue la serie de 1986 en las minas de oro de Serra Pelada , unos 430 kilómetros al sur de la desembocadura del río Amazonas. Las imágenes mostraban a miles de mineros ( garimpeiros ) motivados por el sueño de hacerse ricos rápidamente, que descendían al fondo de la mina en la búsqueda de algún gramo de oro, como si se tratase de un hormiguero. Salgado puso de relieve las peligrosas condiciones en las que trabajaban, la locura y el caos.

La "fiebre del oro" en Serra Pelada en 1986. © Sebastião Salgado

"Serra Pelada era una montaña, pero cuando llegué esa elevación ya no existía más. Solo quedaba un hueco inmenso con 52.000 hombres que buscaban oro con desesperación . Era una degradación brutal de las condiciones laborales, emocionales y de supervivencia humana. Todo el lugar era peligrosísimo, pero los buscadores solo pensaban en encontrar oro ", recordó Salgado en la entrevista con LA NACION desde París, adonde se exilió en 1969, perseguido por la dictadura militar.

En Serra Pelada trabajaban decenas de miles de hombres en condiciones infrahumanas en la búsqueda de oro. © Sebastião Salgado

Serra Pelada llegó a...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR