Consejo de la Magistratura: una reforma posible

Urge cambiar el sistema de selección de jueces, para dotar a la Justicia de una legitimación imprescindible

Consejo de la Magistratura

+++

El debate sobre la reforma del Consejo de la Magistratura se instaló en el debate público en los primeros meses del año, como consecuencia del fallo de la Corte Suprema de Justicia de la Nación que declaró la inconstitucionalidad del Consejo de 13 miembros, aprobado a instancias del kirchnerismo en 2006.

El fallo de la Corte fijó como fecha final para la subsistencia de esa conformación inconstitucional abril de 2022; y dejó abierta una doble vía de solución institucional. La principal, que el Congreso de la Nación aprobara una nueva Ley para esa fecha. En caso de no hacerlo, la integración del Consejo se mantendría conforme a la ley original, con 20 miembros, incluido el presidente de la Corte Suprema.

La impericia política del Gobierno, y la prepoteada innecesaria y torpe de pretender aprobar una reforma al Consejo sin acordar con la oposición, llevó al fracaso de la salida institucional planteada por la Corte (la aprobación de la nueva ley); y habilitó la reorganización establecida subsidiariamente por la CSJN para subsanar una eventual crisis institucional derivada de la inexistencia de una ley reglamentaria.

Por ello el Consejo de la Magistratura se reconstituyó conforme el modelo original de veinte (20) miembros. Se impone recordar que nada impide al Congreso dictar una nueva ley, pero hasta que ello no suceda, regirá la integración de la ley anterior. El dictado de esa nueva ley regulatoria es una deuda pendiente del sistema político en su conjunto. Deuda que resulta muy difícil, por no decir imposible, suponer que sea pagada en lo inmediato.

Con un Ministerio de Justicia de la Nación que se muestra impotente para proponer (ni hablar de designar) a la ministra faltante en la Corte Suprema, o avanzar en la confirmación del pliego del Procurador General; y cuyas cabezas están más orientada a recuperar las prácticas del "Vatayón Militante" que a diseñar políticas públicas que permitan avanzar en las necesarias reformas judiciales pendientes, la posibilidad de sentarse a discutir seriamente una reforma a la Ley del Consejo de la Magistratura es inviable. Si a ello le sumamos que el oficialismo en su conjunto impulsa una ley payasesca y ridícula para conformar una esotérica Corte Suprema de 25 miembros, es evidente que en el campo de la política parlamentaria es imposible sentarse a dar un debate...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR