Cartas de los Lectores

El acto oficial del 25 de Mayo

Para el mismo lado

Dios quiera que el próximo 25 de Mayo nos encuentre con la bandera nacional como única insignia concentradora de todos los presentes. Que ese importante festejo de nuestra querida patria se desarrolle sin "cantitos" partidarios. Que no exista ya la "grieta" que tanto mal nos ha hecho a todos los argentinos, sin excepción. Que nuestro principal representante se dirija a todos sin la necesidad de hablar mal de los "otros", aun sin nombrarlos. Que el himno nacional sea lo único que se cante. Aunque parezca poco, esto solo ya sería un gran avance. Podemos y vamos a volver a ser ese gran país de hermanos, en el que todos empujemos para el mismo lado. Pero para que eso pase se debe empezar con el cambio desde arriba.

Mauricio Maurette

DNI 13.380.744

Gastos y mística

De la simple observación del megaevento organizado por el gobierno nacional surge claramente que el nivel de recursos invertidos para impregnar de mística su proyecto político es directamente proporcional a la carencia de ésta.

Fernando Chain

DNI 13.887.349

Escraches

El sábado pasado, no sabemos si como parte de las celebraciones de la Semana de Mayo, se realizaron escraches a los domicilios particulares del empresario Carlos Pedro Blaquier, cabeza del Ingenio Ledesma, y de Vicente Massot, un intelectual, politólogo, académico, autor de más de una decena de libros y ensayos; a su vez, director del centenario diario bahiense La Nueva Provincia. Ambas acciones fueron promovidas desde medios oficialistas y concretadas por agrupaciones vinculadas con el kirchnerismo. Sobre ambos pesaban, en el caso de Blaquier ya sobreseído por la Justicia, acusaciones de "lesa humanidad" y fueron calificados por los autores del escrache como "genocidas civiles".

Un escrache de por sí es un suceso repugnante, sea quien fuere el destinatario, pero lo es más aún cuando se produce, como en el caso de Massot, por ser un crítico frontal del actual gobierno a través de la línea editorial del diario bajo su dirección. Perseguir por "delito de opinión" sólo prospera en regímenes reñidos con todo principio republicano, en una causa contra natura, donde los fiscales del Ministerio Público se autocalificaron públicamente como "militantes antes que fiscales". Poder no coincidir con el pensamiento de Massot es derecho de todos, de muchos y de pocos, pero montar una causa judicial en pos de alimentar el parcial y sesgado relato oficial de la trágica década de los 70...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR