Carta de los lectores

PALABRAS Y HECHOSEn el acto del sábado pasado en Moreno, la Presidenta dijo: "Nosotros no opinamos, nosotros hacemos". Lo primero que le preguntaría es qué hizo con los trenes luego de las tragedias de Once y Castelar, qué hizo para combatir la inseguridad, la inflación, la falta de desarrollo social... y la lista continúa. Estoy esperando esas acciones, porque por ahora sólo escucho sus opiniones.Ignacio Amayamailto:ignacioamaya@hotmail.comORACIÓN SIMPLEEn vista de la escasez de argumentos convincentes que ofrece actualmente todo el espectro político, y ante la inminencia de tener que tomar decisiones electorales, se me ocurre que una forma de encauzar los sentimientos de una gran mayoría silenciosa y hasta ahora poco participativa es canalizar una protesta pacífica que enarbole banderas tan antiguas como novedosas. Tan antiguas como esa oración simple que hizo suya la orden franciscana y que ahora renueva en todos sus mensajes nuestro papa Francisco y que pareciera hecha a la medida de nuestras necesidades. Concretamente propongo que cada uno de los que compartan estos principios se convierta en una bandera viviente que diga:"Señor, haz de mí un instrumento de tu paz/Allí donde haya odio, que yo ponga amor/Allí donde haya discordia, que yo ponga unión/Allí donde haya error, que yo ponga verdad/Allí donde haya duda, que yo ponga fe/Allí donde haya desesperación, que yo ponga esperanza/Allí donde haya tinieblas, que yo ponga luz/Allí donde haya tristeza, que yo ponga alegría".Tengo la osadía de agregar otra:"Allí donde haya corrupción, que ponga yo mi propia honestidad...".Ricardo GullandDNI 4.317.336CHEVRON E YPFCuando leí el editorial del 23 del actual sobre YPF-Chevron, recordé un artículo de la revista Fortune de la semana pasada que señalaba que Chevron se equivocaba en llegar a este acuerdo con YPF, ya que se desvía de un código no escrito entre las grandes petroleras. Ese código diferencia entre "nosotros", que son las grandes empresas petroleras privadas, y "ellos", los países que controlan las compañías energéticas (como el nuestro). Y puntualiza que a partir de este desvío las grandes petroleras como BP, Exxon y Repsol ya no podrán confiar en Chevron con otros contratos en el mundo en donde se encuentran asociados. El código estipula claramente que ninguna de dichas petroleras aprovechará y firmará contratos con países en donde una de ellas ha sido expropiada o confiscada, que es justamente el caso que nos ocupa.George W. Handleymailto:gwhandley@...

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