Cárceles y celulares
Fecha de publicación | 20 Marzo 2024 |
Especialmente en la política -cualquiera que sea nuestra concepción de ella- cuando juzgamos justificadas las medidas de un gobernante apelamos esencialmente a la idea de prudencia y razonabilidad para establecer en qué consiste lo ajustado, conveniente u oportuno
Los motivos de justificación de una acción determinada ponen de manifiesto, por lo tanto, la necesidad de someter incluso ese proyecto al tribunal de la razón, porque solo la razón puede establecer en qué consiste lo ajustado, conveniente u oportuno de una acción humana. De allí la frase: "un buen rey da órdenes razonables"
Lo razonable en materia política es así sinónimo de prudente. Precisamente la prudencia, y no otra disposición, recurso o habilidad misteriosa es lo que permite al que gobierna señalar por antelación los medios requeridos para lograr los objetivos políticos; es decir, prever . La capacidad de previsión, el sentido de la oportunidad, el discernimiento de lo conveniente, la prontitud en el pronunciamiento son aspectos de la sabiduría prudencial que le exigimos a quien manda para que sus órdenes sean razonables; si las posee será un buen gobernante y sus medidas resultarán siempre justificadas ante los gobernados; en una palabra, su autoridad quedará legitimada en el ejercicio del poder… Y si, además, las acciones emprendidas por el que manda tuviesen relevancia histórica (en tanto su contenido estuviese cargado de significación ética y moral, sobre los principios de justicia, equidad y bien común) dichas acciones ingresarían al patrimonio común de la tradición, trascendiendo las circunstancias concretas que le dieron origen. Los ejemplos históricos, pese algunos baches menores, en esta nuestra Argentina que hoy día nos duele sobran, desde el general San Martín en adelante
Concedámosle por un momento a la Dra. María Laura Garrigós de Rébori, exjueza e interventora del Servicio Penitenciario Federal, independientemente de su pertenencia a Justicia Legítima y que comulga con algunas de las ideas penales de Eugenio Raúl Zaffaroni, el beneficio de la duda y supongamos por un momento que el permiso del uso de celulares en las cárceles lo fue para mantener en calma a los prisioneros a fin de evitar males mayores, como puede ser un motín
Sin duda su disposición resultó razonable, justificable y ajustada los medios a los fines, en términos de Nicolás Maquiavelo en El príncipe , pero careció de la debida prudencia que se le exige a un gobernante político porque no previó las...
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