'Nos capturó una banda mixta, por eso nunca los van a atrapar'

Pasaron casi tres meses del secuestro exprés del que fue víctima durante más de cinco horas y media con su hijo de dos años y su hermano, de 12, pero Matías Isnardi, un contador público de 30 años, tiene las mismas sensaciones y sospechas que la noche del 7 de marzo pasado: "Los delincuentes que nos capturaron eran muy profesionales. Se trataba de un banda mixta o secuestradores con protección de la policía. Nunca los van a atrapar".

Isnardi, su hijo y su hermano fueron secuestrados en la ciudad de Adrogué, en el partido de Almirante Brown. Por la liberación de los tres se pagó un rescate total de 15.000 dólares en Temperley. La primera exigencia de los delincuentes fue de 50.000 dólares.

"Además de ser muy profesionales, los delincuentes se movían libremente. Durante las más de cinco horas y media que estuvimos cautivos iban y venían entre Adrogué y Avellaneda sin problemas", sostuvo a LA NACION Isnardi.

El contador, cuya familia materna es propietaria del reconocido Centro de Diagnóstico Doctor Enrique Rossi, cree que el secuestro fue un hecho al voleo.

"Nos interceptaron cuando circulábamos por Amenedo [un calle con mucho tránsito y que está a cuatro cuadras del centro de Adrogué]. Yo maneja un Ford Mondeo. Nos cruzaron un automóvil VW Vento blanco. Cuatro delincuentes armados se subieron a nuestro auto y me obligaron a ir al asiento de atrás".

Su hermano de 12 años se dio cuenta de lo que pasaba. Su hijo de 2, no. Es más, en un momento de la noche mientras esperaban cobrar el rescate, uno de los secuestradores se bajó del vehículo y fue hasta un quiosco para comprarles a los niños alfajores y caramelos.

Mientras duró el secuestro, Isnardi tuvo sentado sobre sus piernas a su pequeño hijo. "Por suerte, él nunca supo lo que pasaba. En un momento se durmió y se despertó dos horas después".

Pudo haber sido peor

No fue el único hecho de inseguridad del que fue víctima Isnardi. Entre 2009 y 2010 sufrió una salidera bancaria y un fallido intento de secuestro.

"Si bien siempre supe que el secuestro iba a terminar de la mejor manera, cuando pasaron los días uno comienza a pensar que pudo haber sido peor", afirmó el contador público...