La batalla encarnizada por la Ciudad que enfrentó como nunca a Patricia Bullrich con Mauricio Macri

21 de agosto de 2003: Patricia Bullrich en plena campaña visita el living de Mirtha Legrand

Cuando Mauricio Macri entró a la casa de Enrique "Coti" Nosiglia , en Arenales y Callao, lucía visiblemente ofuscado. Lo escoltaban su jefe de campaña y principal operador, Juan Pablo Schiavi , y Raúl "El Gringo" Carignano , uno de los integrantes de la mesa chica del embrionario macrismo. Apenas arrancó la conversación, el entonces titular de Boca Juniors, que daba sus primeros pasos en la arena política, encaró a Miguel Ángel Toma , mandamás del PJ porteño y lugarteniente de Eduardo Duhalde en la Capital. "¡Me jodiste!", le achacó, en un tono ríspido. Lo responsabilizaba por la postergación de los comicios en la ciudad, una decisión que había dispuesto la jueza María Servini de Cubría a raíz de una presentación impulsada por Toma.

Ese aplazamiento, intuía Macri, comprometía seriamente sus chances electorales de vencer a Aníbal Ibarra para arrebatarle la Ciudad. "Si vos cumplías con tu palabra, ibas a ser jefe de gobierno" , le respondió, con una mueca socarrona, el extitular de la SIDE, quien había accedido a reunirse con Macri por pedido de Nosiglia. Con "Coti" como mediador, Macri y Toma llegarían a un nuevo acuerdo para confluir en la contienda porteña: el flamante candidato aceptaba incluir en sus listas legislativas a dos jóvenes exponente del PJ que resguardó el duhaldismo: Cristian Ritondo y Diego Santilli .

La jugada orquestada por Toma para postergar el proceso electoral porteño no fue el único factor externo que frustró un debut exitoso de Macri como candidato. En aquella campaña a jefe de gobierno de 2003, el fundador de Pro, que estuvo acompañado en la fórmula de Compromiso para el Cambio por Horacio Rodríguez Larreta , se enfrentó a la maquinaria de la administración porteña y al "aparato" de la Casa Rosada, donde ya habitaba Néstor Kirchner . En pleno ascenso de su popularidad en las encuestas tras asumir como primer mandatario, Kirchner tuvo un papel fundamental para mejorar la performance de Ibarra en el ballottage. Pero, en su primer test en las urnas, Macri tuvo que soportar otro incordio. Una oposición demasiado incómoda para el inicio de su carrera ascendente. Es que hasta las elecciones generales del 24 de agosto sufrió el desgaste de una larga seguidilla de embates públicos de una contrincante acérrima: Patricia Bullrich .

20 de Junio de 2003. El candidato Mauricio Macri recorrió un centro de salud en el barrio de Soldati

Micrófono en mano, Bullrich se convirtió en un dolor de cabeza para Macri , a quien detestaba por su recorrido personal y político. A diferencia del titular de Boca Juniors, Bullrich ya contaba en ese momento con una extensa trayectoria dirigencial. Mientras en los 70 el fundador de Pro se divertía con sus amigos del Cardenal Newman, ella militaba en la Juventud Peronista . Antes de aliarse con Ricardo López Murphy (Recrear) para los comicios presidenciales de 2003, Bullrich había pasado por las filas del menemismo y el duhaldismo, y orbitado cerca de Domingo Cavallo . Con López Murphy forjaron una estrecha relación durante el gobierno de Fernando de la Rúa , cuando compartieron el gabinete nacional. Bullrich renunció del Ministerio de Trabajo antes de que estallara la crisis social y económica de 2001. "Me vas a echar a mí y después van a venir por vos. Si el peronismo ve debilidad, te destruye" , le advirtió a De la Rúa poco antes de ser eyectada...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR