La baja inflacionaria, tres meses atrasada

TOKIO.- (De un enviado especial) Por primera vez, el presidente Mauricio Macri reconoció que el Gobierno no logrará alcanzar la meta que proyectó para la inflación en 2017.

Es que en lo que va del año, ya se registró un alza del costo de vida superior a lo previsto. El alza de precios acumula un 9,1% en el primer cuatrimestre, cerca de la banda de entre el 12 y 17 % que el Banco Central (BCRA) fijó como objetivo inflacionario.

En la entrevista con LA NACION, el jefe del Estado habla pausado, salvo cuando quiere reafirmar algo. Ahí se incorpora y enfatiza las cuidadas palabras que utiliza. Eso sucede cuando se refiere a la inflación, uno de los grandes problemas que aún no logró domar. Dificultad, incluso, de la que se hizo cargo.

Si bien Federico Sturzenegger, presidente del Banco Central, ratificó la meta de inflación determinada por la entidad la semana pasada, lo cierto es que en el Gobierno ya nadie cree que ese número sea una posibilidad tangible; ni siquiera el Presidente.

-La inflación es uno de los grandes dolores de cabeza de su gestión. ¿Por qué se demora la baja?

-La inflación es el primer gran desafío porque es lo que más afecta a los que menos tienen.

-¿Se está demorando más de lo que pensaba?

-(Silencio). Digamos que pareciera que está tres meses atrasado sobre el nivel de reducción que queremos, pero la tendencia es buena.

-¿Aún cree que es posible cumplir la meta inflacionaria que fijó en el presupuesto para este año?

-Confío en que vamos a llegar a un dígito en 2019. Ese es el desafío. Las etapas, tres meses más o tres meses menos, no van a cambiar. Lo que cambia es ir en una tendencia a la reducción y...