La Argentina se liberó y dio un salto de calidad

AREQUIPA.- Al fin, se desató. Como cuando los tenistas sueltan el mejor golpe. Como cuando los tenistas tienen la mano caliente. Eso es lo que habrá sentido anoche el seleccionado argentino Sub 20. Al fin, se liberó. Jugó un escalón mejor de lo que había demostrado en los partidos anteriores, ganó y se clasificó primero en el Grupo A. Ahora, sólo tiene que esperar que empiece la acción de la rueda decisiva. Todos contra todos, en el hexagonal final. Anoche, cantó bajo la lluvia con un destacado segundo tiempo y se impuso a Chile (quedó muy comprometido) por 3 a 1. Tal vez, lo único negativo haya sido la tarjeta amarilla que sufrió Bruno Zuculini, que no podrá jugar el próximo partido.Sin embargo, su salida y la de Rodríguez coincidieron con el mejor momento de la Argentina. Otra vez Walter Perazzo acertó con los cambios: los ingresos de Battaglia y Hoyos le dieron mayor orden y creatividad a una formación adormecida. La Argentina empezó el partido con una mezcla de titulares y suplentes, ya asegurada la clasificación. Pero con el transcurrir del tiempo, soltó la mano. La tuvo caliente. Como en el tenis, como en el básquetbol. Sintió que podía. Que debía, en realidad. Por su historia, por su pasado. Y apareció la potencia y habilidad de Facundo Ferreyra, un chico de Banfield con sueños de grandeza, que pide pista detrás de Funes Mori. Primero, definió con serenidad una buena jugada que empezó con un centro de Cardozo, que derivó en un toque de Galeano al travesaño. Allí, donde debía estar, estuvo Ferreyra. Al rato, mejor aún...Encaró por la derecha, velocidad y explosión pura, dejó en el camino a un zaguero y tocó con suavidad al palo más lejano del arquero chileno. Tuvo tiempo para sufrir, pero apenas unos minutos, cuando Alejandro Martínez logró el descuento. La Argentina, liderada por Hoyos, el chico de Estudiantes, el campeón, no se quedó. Fue, buscó, intentó. Quiso confirmar que era la mejor producción del torneo. Un tiro de Hoyos chocó con un palo y, entre algunos rebotes insólitos, Mosca le puso el cuerpo a la victoria.Así, la Argentina continuó hasta el final. Ya Chile no lo inquietó mucho más, ya había pasado ese primer tiempo timorato y aburrido, en el que la lluvia y el poco público marcaron la tendencia más lógica.Hubo, seguro, un lavado de cabezas en el segundo capítulo. Surgió la determinación que no había tenido hasta ayer nomás. Aparecieron las individualidades, otra vez. Con Ferreyra, con Hoyos. Pero, sobre todo, con el...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR