La amenaza que faltaba

"Si ustedes no me pagan, voy a venir con los de La Cámpora y les voy a romper todo."

(De una vecina porteña al amenazar a sus inquilinos morosos.)

La vecina de La Boca estaba fuera de sí. Amenazó a sus inquilinos con sacarlos de los pelos y romperles todas sus pertenencias si seguían sin pagarle. "Los voy a reventar, voy a traer a La Cámpora y les voy a romper todo", gritaba. La mujer cometió dos fallas gravísimas: en primer lugar, el delito de amenazas coactivas, por lo que la Cámara del Crimen la mandó derechito a juicio oral, y, en segundo término, creer que La Cámpora se dedica a sacar gente. No, señora, La Cámpora no saca, pone gente.

Cuentan algunos vecinos que, en algún momento, la mujer barajó otras opciones, como reemplazar al comando camporista con el estudio de abogados López-Zaffa, especialistas en sacar presos. Si podían liberar a convictos peligrosísimos, ¿cómo no iban a poder sacar a unos cuatro gatos que no pagan el alquiler?

También habría pensado en recurrir a "Pucará" Berni para que sobrevolara la zona, pero la alertaron de que no es muy eficiente: espanta protestas en las rutas, pero no puede frenar que ingresen malones de curiosos en los baños de departamentos bajo su custodia.

Por un momento, la mujer desvarió con contratar a la multinacional Reduce-Fast-Kici. Pensó en la habilidad de esa corporación para minimizar problemas. Pero dio marcha atrás cuando sospechó que podrían estafarla desendeudando a sus inquilinos. Incluso, se tentó con...

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