Alarma,es una incógnita la presencia de Leo Messi en la final con River

YOKOHAMA.- El Mundial de Clubes se convirtió en un maleficio para las estrellas de Barcelona. La cita intercontinental, que tenía a los catalanes como amplios favoritos antes del arribo de la delegación a esta ciudad, ahora no asoma tan clara en el horizonte. El parte médico, el comunicado que emitió la entidad blaugrana en las distintas plataformas oficiales, encendió las alarmas un par de horas antes de la presentación frente a Guangzhou Evergrande, de China. El mejor jugador del mundo, Lionel Messi, era desafectado del cotejo contra el campeón asiático y su presencia, desde ese instante, resulta una incógnita para el encuentro definitorio frente a River, de pasado mañana, a las 7.30, en la sede donde se cerró la Copa del Mundo de Corea-Japón, de 2002. Una afección renal le impidió al crack, la pieza más valorada y venerada por los hinchas japoneses, ir al estadio, ahí donde el cuerpo técnico, con el liderazgo de Marcelo Gallardo, el director deportivo Enzo Francescoli y los principales dirigentes millonarios, observaron la goleada culé ante un rival de escasa envergadura, que sucumbió casi sin incomodar el juego de Barcelona. La baja del rosarino se sumó a la de Neymar, su compinche, dentro y fuera de la cancha, quien se recupera de un desgarro en el aductor izquierdo. Entre los catalanes, nadie se atrevió a manifestar que las dos figuras ya están descartadas, pero la novedad hizo crecer la ilusión de levantar el trofeo en el búnker de River.

"Síndrome nefrótico, señala el comunicado". Y adelanta que "su evolución marcará la disponibilidad para los próximos partidos". Con el descenso de los futbolistas del ómnibus que llevó al plantel desde el Royal Park Hotel hasta el gigantesco estadio salió a la luz que algo extraño había ocurrido con Messi. En el centro de prensa, un espacio que resultó de dimensiones escasas para la cantidad de medios acreditados, las miradas de los enviados españoles y argentinos se cruzaban buscando un indicio sobre la salud del rosarino. Todas las conjeturas posibles se realizaron en ese salón del tercer piso, mientras Leo descansaba y buscaba consuelo en la gigantesca torre de 70 pisos y 296 metros de altura, donde el valor de las habitaciones oscila entre los 175 y 330 dólares la noche.

Con la fácil victoria de Barcelona por 3-0, la mirada se proyecta al próximo paso: ahí aparece River para disputarle mano a mano la oportunidad del título. Hay ojos que disparan una luminosidad diferente entre los millonarios...