El 'aguante' a la Presidenta fue fiel hasta los últimos momentos

Mientras el helicóptero presidencial levantaba vuelo para llevar a Cristina Kirchner a la residencia de Olivos, el "campamento del aguante" frente al Hospital Austral fue puro festejo. Tirando agua, gritando y saltando, unos cien militantes celebraban el alta médica y la noticia de que la jefa del Estado finalmente no padece cáncer."¡ Estoy contenta porque Cristina salió adelante. Al final no era nada!", exclamó a LA NACION Sandra Leiva, de 29 años. Eran las 11.10, y los manifestantes de la JP, La Cámpora y Los Kumpas coparon el centro de la escena entonando la versión kirchnerista de la marcha peronista, además de cánticos contra "los gorilas" y el diario Clarín.Con esos festejos, llegó a su fin el "campamento del aguante", que agrupaciones de jóvenes, movimientos sociales y de varios intendentes del conurbano instalaron en la avenida Perón 1500, en Pilar, para brindar su apoyo a la Presidenta desde el lunes pasado.Entre ellos, se vio a los diputados nacionales Andrés Larroque y Eduardo de Pedro.El último díaA las 7 de ayer, algunos militantes ya intentaban desvelarse cantando. Esperaban la confirmación de que Cristina Kirchner dejaba el hospital. Se los contaba con el dedo de una mano.Entre los cinco manifestantes estaba Juan Pablo Alegre, de la agrupación Peronismo Militante. Vestía un poncho rojo. Sus ojos medios cerrados, su voz apagada y su pelo despeinado demostraban que necesitaba descansar. "Calentamos motores ahora y después festejamos", contó Juan Pablo, que con 18 años estuvo desde el lunes en la vigilia."Sólo volví a mi casa el miércoles. Apenas gasté 20 pesos en toda la semana, porque los kumpas de acá me dieron comida y carpa", detalló.Los minutos corrían y el vocero...