Advierten que es un paliativo que no soluciona el problema de fondo

El anuncio oficial de que los sueldos inferiores a los 35.000 pesos brutos mensuales quedarán exceptuados del pago de Ganancias en el medio aguinaldo representa un paliativo que no alcanza para resolver las distorsiones provocadas por la falta de actualización del impuesto.

Al menos es la opinión generalizada de los tributaristas consultados por LA NACION, que destacaron que se trata de un nuevo parche para hacer frente a los efectos distorsivos de la inflación.

Según anunció la propia presidenta Cristina Kirchner, la medida beneficiará al 70% de los trabajadores que hoy están pagando Ganancias, lo que representa más de 780.000 personas. De acuerdo al cálculo de Maximiliano Castillo Carrillo, director de la consultora ACM, el costo fiscal de la exención rondará entre 2000 y 2500 millones de pesos.

"Esta medida es un alivio temporal para el dolor que provoca el pago del impuesto excesivo. Es lo más parecido a una aspirina que calma el dolor, pero no es curativa", afirmó el tributarista César Litvin. "Ahora falta el antibiótico, que consiste en incorporar una cláusula de ajuste automático al mínimo no imponible, a mi criterio equivalente a ocho salarios mínimos", agregó.

De la misma manera, Litvin reclamó una adecuación "incuestionable" de las tablas de alícuotas progresivas. "La que está vigente obliga a pagar la alícuota mayor [que es de 35%] a los que tienen ingresos netos anuales de 120.000 pesos", dijo Litvin y cerró: "Así, el que gana 120.000 pesos o 10 millones al año pagan la misma tasa de impuesto, pulverizando la equidad deseada con un impuesto progresivo".

"Es un paliativo que claramente tiene un impacto marginal para los más afectados por la decisión de no actualizar el mínimo no imponible, que son los alcanzados por el impuesto que menos ganan. Al no tocar las escalas, los que menos ganan pasan a tener una mayor presión tributaria con cada aumento en sus salarios, mientras que los sueldos más altos siguen en la escala del 25%", coincidió Nadin Argañaraz, economista del Instituto Argentino de Análisis Fiscal (Iaraf).

Por su parte...

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