El abrazo del Irízar al ARA San Juan

Con sus uniformes de color naranja, a 1300 kilómetros del Polo Sur, la tripulación del rompehielos Irízar, que volvió a la Antártida después de más de diez años, rindió homenaje a los 44 tripulantes del ARA San Juan, que aún permanece desaparecido.

La emotiva formación tuvo lugar cuando el rompehielos llegó a la Base Antártica Belgrano II, la más austral de la Argentina en el continente blanco. La imagen del número 44 junto al emblemático buque fue tomada desde uno de los helicópteros embarcados en el Irízar y dio rápidamente la vuelta al mundo, a través de las redes sociales.

En su regreso a la campaña antártica, tras la prolongada restauración a la que fue sometido tras el devastador incendio que sufrió en abril de 2007, el Irízar arribó a la Base Belgrano II para efectuar el recambio de la dotación, que permanecerá durante un año, y llevar el aprovisionamiento necesario de víveres y combustibles. El Irízar realiza esa tarea con la ayuda de dos helicópteros Sea King que lleva en su cubierta.

Toda una novedad en las campañas antárticas de verano, ya que en los últimos diez años se debió recurrir a esquemas más complicados para realizar la tarea de aprovisionamiento y recambio de personal.

Ante la imposibilidad de contar con el Irízar, en los últimos diez años el gobierno argentino alquiló para las campañas antárticas de verano buques polares extranjeros, como la embarcación rusa Vasiliy Golovnin, que no tenían la capacidad de un rompehielos y estaban impedidos de llegar a la base más austral. Para cumplir con el relevo del personal se contrataba un avión sudafricano Douglas a hélice acondicionado con...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR