Cristina y el olvido de los fondos buitre

Ministros y gobernadores exhiben una extraña calma en medio de una vasta crisis económica. Los calmó la certeza de que en enero se iniciará una que le ganaron al Gobierno en el juzgado de Thomas Griesa. El arreglo o la ruptura podrían significar perspectivas muy distintas para muchas cosas. Marcarían a fuego el final de , la elección presidencial del año próximo y la suerte inicial, al menos, del futuro gobierno. Un economista independiente, pero no enfrentado con Cristina Kirchner (hace poco ésta lo citó públicamente), asegura que un eventual acuerdo significará un crecimiento de 3 por ciento del PBI para 2015; la ruptura podría, en cambio, empujar una caída del 3 por ciento durante ese año. Política, economía y elecciones volverán a encontrarse.El propio Daniel Scioli no hubiera optado por un discurso cada vez más leal al cristinismo si no tuviera dos informaciones nuevas. Voceros y operadores presidenciales parecen resignados a que el gobernador será, en el último tramo del camino, el candidato consentido por la Presidenta. La beligerancia del cristinismo contra él no desapareció, pero cayó ahora a niveles casi inexistentes. Por otro lado, Scioli está convencido de que habrá un acuerdo con los fondos especulativos que le hará menos pesado el título de sucesor. El acuerdo inminente es su plan. Un escenario catastrófico de la economía sería devastador para Scioli. La visible (y a veces inexplicable) prudencia de las campañas de Mauricio Macri y de Sergio Massa se explica también en la posibilidad de que suceda, o no, ese acuerdo. Necesitan saber con qué gobierno se enfrentarán durante el año que viene, en qué medida deberán apostar a ciertas continuidades o a un cambio definitivo.A todo esto, ¿qué probabilidades reales existen de que haya negociación y acuerdo? El equipo económico está metido en cuerpo y alma en ese proyecto. Ya hay mensajes cifrados que han viajado desde Buenos Aires hasta Nueva York. "Empezamos en enero", repiten con la convicción de los conversos. Esa seguridad fue explayada por el ministro de Economía, Axel Kicillof, ante el Grupo de los Seis, que reúne a empresarios de todos los rubros. Un poco más tarde, el nuevo presidente del Banco Central, Alejandro Vanoli, se lo dijo de igual forma a los bancos nacionales y extranjeros. La única diferencia entre Kicillof y Vanoli es que este último habla de un plazo de seis meses de negociaciones. Kicillof pareció decir que sólo es cuestión de sentarse, negociar y acordar en tiempos muy...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR