Berlusconi festejó su cumpleaños con 'amargura'

ROMA.- Con motivo de sus 75 años, Silvio Berlusconi fue agasajado ayer con una torta milhojas, sin velitas, pero tuvo poco para festejar. El Cavaliere , que por sus cirugías e implantes capilares aparenta menos edad que la que en verdad tiene, llegó a este cumpleaños con su credibilidad -nacional e internacional- por el piso y en medio de una nueva oleada de escuchas telefónicas escandalosas.Berlusconi, de hecho, confesó "amargura" en una fiesta de cumpleaños que le organizó anteanoche Alessandra Mussolini, la nieta del Duce . Una amargura lógica si se tiene en cuenta que, luego de dominar el escenario político desde 1994, ahora la mayoría de los analistas lo considera muerto políticamente o en plena agonía.En un clima de final de reinado desde hace meses, se ha vuelto común leer editoriales hasta en diarios que no son opositores, como el Corriere della Sera o el Sole 24 Ore, que le piden al Cavaliere un paso al costado, en un gesto patriótico.Italia parece a la deriva tanto a nivel económico (el default sigue al acecho) como político. Y los italianos parecen haber caído en la cuenta de que esa "revolución liberal", esas promesas de Berlusconi de más trabajo, menos impuestos, crecimiento económico, bienestar para todos sólo fueron eso: promesas.En medio de una crisis de credibilidad sin precedente, con ataques especulativos de los mercados financieros que lo obligaron a un ajuste durísimo, el gobierno de Berlusconi sobrevive por inercia. Porque cuenta con una exigua mayoría parlamentaria...