Una escala paradisíaca antes del Mundial

Para los jugadores del seleccionado argentino juvenil, el reposo de los guerreros se da antes de la batalla. Y vaya en qué lugar. Tahití, una isla de ensueño en la Polinesia francesa, está deleitando al plantel nacional en su escala hacia Nueva Zelanda, donde desde el sábado de la próxima semana participará en el Mundial de la categoría.

El hotel Pearl Beach, con su piscina y su vista bucólica, fue el sitio ideal para que los futbolistas disfrutaran su media jornada libre y empezaran a deshacerse de los efectos del jet lag, que los hicieron levantarse bastante temprano. Truco, mates, charlas, música y baños en la pileta fueron los pasatiempos principales, aunque varios se dedicaron a sesiones livianas en el gimnasio, antes de la práctica vespertina en el estadio Pater. Allí se hará el amistoso de la madrugada argentina del viernes frente al seleccionado mayor de Tahití, la principal isla del archipiélago y territorio francés de ultramar, a poco más de mitad de camino entre la Argentina y Nueva Zelanda, pero con una desviación hacia el norte.

El conjunto dirigido por...