La Corte evita enfrentarse con Cristina Kirchner

"Estamos totalmente de acuerdo con las reformas http://www.lanacion.com.ar/1560218-el-gobierno-avanza-en-la-letra-chica-de-los-cambios-en-la-justiciapara la Justicia", fue el mensaje contemporizador que ayer deslizaron en la Corte Suprema. La lectura íntima que hacían los jueces era algo más compleja: "La Presidenta está en guerra con la Corte, pero la Corte no está en guerra con ella".Entre el viernes pasado, cuando la Presidenta anunció http://www.lanacion.com.ar/1560215-resistencias-a-la-reforma-dentro-del-consejovarios proyectos de reforma judicial, y la reunión que ayer tuvieron los jueces supremos transcurrieron apenas cuatro días. Pero fue suficiente para que el alto tribunal trazara una estrategia: la Corte decidió no asumir el rol de oposición, porque tal vez es lo que quiere el Gobierno, pero no es el rol propio del alto tribunal.Por eso, fuentes cercanas a Ricardo Lorenzetti –el presidente de la Corte que el viernes lució visiblemente desconcertado mientras la Presidenta anunciaba las controvertidas reformas– salieron a dar señales de clara distensión."Los jueces creemos que tienen que hacerse reformas y, en realidad, ya las veníamos encarando", afirmó uno de los integrantes del cuerpo.La habitual reunión de los martes tuvo un desarrollo normal, pero sobre el final todos los magistrados, durante una media hora, intercambiaron opiniones sobre los dichos de la mandataria. Momentos antes también habían dedicado unos minutos a hablar sobre la necesidad de establecer que los jueces paguen impuesto a las ganancias, uno de los reproches que hizo Cristina Kirchner y que ella misma dejó en manos de la propia Corte."No hay una crisis entre el Poder Judicial y el Ejecutivo. Los integrantes de Justicia Legítima –la agrupación que impulsa la procuradora general, Alejandra Gils Carbó, y que respalda las posiciones de la Presidenta– son todos amigos. Si tienen propuestas, que las hagan y se debaten. No hay clima de fractura, pero tampoco hay clima de refundar la Justicia", deslizaron en el tribunal.En rigor, a los ministros supremos les había quedado claro que el ataque de la Presidenta tenía un origen político, la intención de amedrentar a los jueces más independientes, más que encarar una verdadera reforma judicial.Pero los jueces intuyeron que levantar la cabeza para contestarle a Cristina Kirchner sólo los llevaría a un enfrentamiento desgastante, donde la política no tiene los límites, más prudentes, que sí tienen los jueces. Y, además, si se analizan los...