África mía: los argentinos que ganan en la tierra del superávit

El continente africano se convirtió en la última esperanza de los castigados exportadores argentinos. En el último tiempo, África pasó a ser el único bloque comercial con el que la Argentina conserva un balance positivo, lo que explica que a pesar de las dificultades que siempre representa hacer negocios en Sudáfrica, Nigeria o Argelia, haya cada vez más empresarios locales dispuestos a diversificar sus destinos de exportación.

A la hora de salir a la conquista de nuevos clientes, en las compañías argentinas admiten que el principal atractivo que ofrece el mercado africano pasa paradójicamente por sus dificultades, ya que el desafío que implica ingresar a una plaza no tradicional tiene como correlato una menor competencia internacional. Además destacan que el origen argentino les termina jugando a favor, ya que cuentan con una mayor capacidad de adaptación que sus pares europeos o norteamericanos frente a un contexto económico y social que no es el más estable.

Un ejemplo de capacidad de adaptación es el de BGH, que asociada con la brasileña Positivo Informática, a fines de 2014 se impuso en una licitación para poner en marcha una fábrica de computadoras en Ruanda, apuntando al segmento educativo. "Habernos transformado en el principal proveedor de informática en la Argentina, y en Uruguay a través de nuestra participación en el plan Ceibal, nos permitió conformar un equipo de trabajo con gran experiencia en educación", asegura Leandro Pugliese, gerente de marketing de Positivo BGH.

El proyecto en Ruanda significó el desembarco de BGH en África y en la empresa aseguran que ya tienen en la mira otros mercados dentro del continente. "Tanto África como América latina se encuentran en un proceso de fuerte inserción digital y hoy tenemos proyectos en desarrollo en al menos otros seis países africanos para los próximos doce meses", asegura Pugliese.

En la bodega Dante Robino, por su parte, destacan que en una industria con tantos jugadores internacionales, el mercado africano ofrece una oferta más restringida. "Hoy estamos exportando a Nigeria, Ghana y Costa de Marfil. Son mercados con muchos vaivenes, pero en los que la competencia internacional es bastante menor", reconoce Rafael Squassini, socio de la bodega.

El empresario además destaca que en la mayoría de los países de la región ofrecen un mercado inmaduro. "Lo que se venden son muchas bebidas dulces para la mayoría de la gente y vinos de alta gama para la élite", precisa el bodeguero.

...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR