Whitney Houston: una diva que se fue demasiado rápido

El hotel Beverly Hilton, en el corazón de Beverly Hills, a pocas cuadras de Rodeo Drive y a pasos de las mansiones más lujosas de Los Angeles, suele ser el escenario de fastuosas fiestas organizadas por la industria del cine y de la música. Allí se lleva a cabo la ceremonia de entrega de los Globo de Oro y allí también se organiza anualmente una celebración en la víspera de los premios Grammy. Comandado por el productor Clive Davis, el encuentro suele reunir a destacados músicos con personalidades del espectáculo que cenan, se diviertenEn los últimos tiempos, Houston intentó, con poca suerte, recuperar su carrera y actúan para sus pares sin la intromisión de las cámaras. En esa gala hace más de dos décadas Davis presentó a una joven promesa, la más reciente adquisición de su sello discográfico, una cantante de 18 años llamada Whitney Houston. La misma que a los 48 años había sido declarada muerta en el cuarto piso del mismo hotel, apenas media hora antes de que las estrellas empezaran a llegar al lobby del Beverly Hilton, con las sonrisas listas para los paparazzi. Está claro que en Hollywood se toman muy en serio aquello de que el show debe seguir, especialmente durante la temporada de premios. Britney Spears, Diana Ross, Jane Fonda y Alicia Keys, entre muchos otros destacados artistas, caminaban por la alfombra roja camino al salón dónde se llevaría a cabo la fiesta."A estas alturas todos ustedes ya escucharon la imposiblemente trágica noticia de la muerte de nuestra amada Whitney. Estoy devastado por la muerte de alguien que significó tanto para mí durante tantos años. Whitney estaba llena de vida, era una persona hermosa y con un talento incomparable. Ella bendijo este escenario con sus grandes actuaciones durante años. Sencillamente, Whitney hubiera deseado que la música continuara y su familia nos pidió que así lo hiciéramos", explicó Davis durante la celebración.Mientras la familia de Houston se acercaba al hotel, incluida su hija de 18 años Bobbi Kristina, Tony Bennett tuvo el dudoso privilegio de ser el primer artista en subir al escenario de la gala."Primero fue Michael Jackson, luego Amy Winehouse y ahora la magnífica Whitney Houston. Legalicemos las drogas ya, como en Amsterdam, que es una ciudad muy cuerda ahora", declaró Bennett en la fiesta que continuó a pesar de la muerte de una de sus más legendarias asistentes.Tal vez inspirados por la realización del evento, los productores de los Grammy decidieron también que su celebración seguiría...