Vale todo en el fútbol argentino

El panorama de los clubes de fútbol agrupados en la AFA parece una pesadilla en la que se mezclan la violencia, las muertes y el miedo que siembran los barrabravas, con las deudas que muchas de las entidades mantienen con organismos públicos por una suma que superaría los 600 millones de pesos. Los clubes se van convirtiendo en aguantaderos y, prisioneros de sus pasivos, deberán someterse a un proyecto del Gobierno para sanear sus finanzas.En lo que hace estrictamente a la violencia, ya no sólo se enfrentan barrabravas de distintos clubes, sino también grupos antagónicos de la misma hinchada, como ocurrió con la de Nueva Chicago en hechos recientes, en los que se produjo el enfrentamiento filmado en el hospital Santojanni, que ya arrojó dos muertes, la última de ellas ocurrida ayer. Se trata de un barrabrava que había quedado internado en ese hospital luego de las agresiones por haber recibido un puntazo. Debido a su fallecimiento y temiendo nuevos enfrentamientos, la AFA decidió suspender el partido que hoy iban a jugar Nueva Chicago y Lamadrid.Esta estela mortal que se prolonga y aumenta desde hace años sólo puede explicarse mediante la complicidad de las dirigencias de las entidades, sumada a los vínculos de la política con el fútbol.Los clubes conviven con pasivos inmanejables y tienen con la AFIP deudas millonarias, pero nada de ello impide que hablen de cómo se amplían los planteles. Es habitual escuchar a un dirigente que al tiempo que admite que su club está en rojo, agrega que la prioridad es comprar algún jugador. Lo hizo hace poco el flamante presidente de Boca Juniors, Daniel Angelici, cuando habló de las gestiones para incorporar al delantero uruguayo Santiago Silva.El circuito de complicidades y corrupción que armaron dirigentes, técnicos y jugadores está tan aceitado que nadie mueve un dedo para que se respeten los reglamentos porque ello no les conviene y porque quien hoy es perjudicado, mañana será beneficiado. Bajo el enorme paraguas del eterno presidente de la AFA, Julio Grondona, los dirigentes dibujan balances, se embarcan en deudas impagables y van dejando cada vez más condicionadas a las administraciones futuras, las cuales no pasan de la simple protesta de rigor y rápidamente se incorporan al sistema. Así, se perdió en la nebulosa la famosa auditoría que el presidente de River Plate, Daniel Passarella, prometió hacer y difundir sobre la gestión de José María...