Los tres pilares de Franco

ASUNCION.- El gobierno de Federico Franco fue masivamente rechazado en el exterior, pero encontró tres sólidas patas para consolidarse puertas adentro de Paraguay.Además del Congreso, que destituyó a Fernando Lugo por una mayoría abrumadora, cuenta con el respaldo de la jerarquía de la poderosa Iglesia Católica paraguaya y también los empresarios, especialmente los del sector agrícola.Sobre ese trípode intenta Franco apoyarse ahora para demostrar en el exterior que la mayoría de los paraguayos acepta el cambio."Se abre ahora un tiempo de cambios y ajustes en el que esperamos que los reclamos del campo, largamente postergados, sean tenidos en cuenta", dijo con entusiasmo el presidente de la Unión de Gremios de la Producción (UGP), Ramón Sánchez, que anunció la desactivación de un "tractorazo" que estaba previsto para ayer en repudio a las políticas de Lugo.De la misma forma, los representantes de la Unión Industrial del Paraguay (UIP) y la Asociación Rural del Paraguay (ARP) se mostraron ayer conformes con el nombramiento de Manuel Ferreira Brusquetti al frente del Ministerio de Hacienda."El ex presidente Lugo tuvo una política ambigua, especialmente en cuanto a la invasión de tierras por parte de campesinos. Y un empresario jamás va a querer invertir si tiene en riesgo de perder su propiedad", dijo a LA NACION el presidente de la Asociación de Empresarios Cristianos (ADEC), Luis Fretes.En este sentido, Fretes expresó su confianza en Franco, líder del Partido Liberal (PLRA). "Yo creo que Franco va a ser mucho más firme en lo que hace a respetar la propiedad privada", dijo.Los empresarios no dejan de reconocer sin embargo las buenas posibilidades económicas que se abrieron durante la gestión de Lugo."Nosotros hemos tenido ocho años de crecimiento", afirma Pascual Rubiani, un empresario agrícola y publicitario. Sin embargo, los titubeos del ex presidente en la cuestión de la reforma agraria le hicieron perder sustento en el sector."La reforma agraria fue una de las grandes promesas de Lugo y uno de los grandes desencantos de su gestión", resumió Rubiani.En Paraguay, el 80% de las tierras fértiles están en poder del 2% de la población. Los terrenos, en su mayoría, están destinados a la producción agrícola y ganadera, que por primera vez en 2010 permitió que Paraguay tuviera un crecimiento económico del 14,5%. El área destinada a su...