Tres piezas como punto de partida

"Casi Tennessee es, de algún modo, un homenaje al dramaturgo Tennessee Williams, ícono de un realismo que ahondó en la complejidad de los vínculos humanos", explica Edgardo Dib, quien realizó la puesta en escena y dirección de esta obra que se estrena el domingo.

Se trata de la historia de Cornelia Moore y Grace Hardwicke, dos seres que transitan sus vidas diminutas en aquel antiguo departamento sobre el cual aún traquetea el último tranvía de la ciudad. Lo que ellas no saben es que, casi silenciosamente, son un sentido tributo a un grande que siempre conmovió al mundo y lo seguirá conmoviendo con su extraordinaria pluma. Están encarnadas por Mónica Buscaglia y Ana Padilla, actrices de trayectoria que vienen trabajando juntas desde principios de los años 80. "Desde una escritura personal, «convoqué» a tres de las obras de este autor norteamericano para la construcción de una nueva historia. Estas piezas son Lo que no se dice, Un tranvía llamado deseo y El zoo de cristal", aclara Edgardo Dib, autor del texto.

La pieza transcurre en dos épocas diferentes, con pronunciados saltos temporales. "El autor eligió 1973 y 2008. La elección no es antojadiza, pero no se puede adelantar demasiado. En 1973 se estrenó la película El golpe y en 2008 murió Paul Newman. Hay algo muy importante en la trama que se relaciona con este film", explica Ana Padilla. "Es una propuesta que va y viene todo el tiempo en esos dos años y cuenta la relación entre estas dos mujeres, con una puesta muy minimalista y...

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