Tras las críticas iniciales, la UCR apoyó la designación de los candidatos a la Corte

Agua mineral, café y los oídos abiertos a las críticas. El combo con el que Mauricio Macri agasajó ayer a la cúpula del radicalismo en el Salón Norte de la Casa Rosada tuvo un objetivo concreto: aplacar los ánimos en la UCR, caldeados luego de las designaciones, vía decreto de necesidad y urgencia (DNU), de Horacio Rosatti y Carlos Rosenkrantz como nuevos jueces de la Corte Suprema.

Más allá de las críticas que la decisión presidencial generó en la reunión a puertas cerradas, Macri logró su objetivo. En la conferencia de prensa que siguió al cónclave, el titular del Comité Nacional de la UCR, José Manuel Corral, y el jefe de los senadores, Ángel Rozas, expresaron su apoyo a la medida. Además, relativizaron las críticas de miembros de su propio partido, como Julio Cobos y Ricardo Alfonsín, y, de paso, reforzaron su respaldo a "este proceso" del que -aclaró Corral- "nos sentimos parte y protagonistas".

Puntuales, los radicales llegaron minutos antes de las 12 a Balcarce 50. Además de Corral y Rozas, estuvieron el titular del bloque de diputados, Mario Negri; el ex titular partidario, Ernesto Sanz; el actual funcionario del Ministerio de Defensa, Walter Ceballos; el legislador porteño Juan Nosiglia, y la senadora nacional por Tucumán Silvia Elías de Pérez.

En el salón, además de Macri, los esperaban el jefe de Gabinete, Marcos Peña; el ministro del Interior, Rogelio Frigerio (que participó de la conferencia de prensa); el titular de la Cámara de Diputados, Emilio Monzó, y el presidente de Pro y flamante titular de Yacyretá, Humberto Schiavoni. La reunión entre el Presidente y los dirigentes radicales duró apenas media hora.

"Somos parte del mismo equipo; contra los pronósticos tomamos confianza entre nosotros y llegamos juntos al gobierno", les dijo Macri a modo de bienvenida, según contaron a LA NACION dos asistentes a la reunión.

Frigerio dio más detalles sobre el plan para bajar los decibeles de sus aliados radicales: les ofreció la conformación de una comisión parlamentaria para "informar y tener al tanto" a ambas partes sobre eventuales medidas a futuro, que incluirían las del Poder Ejecutivo.

Desde el radicalismo, en las voces de Corral, Rozas y Negri, hubo aceptación, más allá de aclarar que la decisión de Macri despertó "dudas", como las calificó Corral en su encuentro posterior con los medios de prensa.

Durante la reunión, los representantes de la UCR pidieron reforzar "una nueva relación entre la Nación y las provincias", y...