Trámite de tintas: editores y distribuidores denuncian que la Secretaría de Comercio Interior retiene libros importados

A un mes del comienzo de la Feria del Libro, se desata una polémica entre editores y funcionarios

Asoma una nueva polémica: desde mediados de enero, y a un mes del inicio de la Feria Internacional del Libro de Buenos Aires , en los depósitos fiscales de la Aduana se retienen grandes cantidades de ejemplares importados por editoriales y distribuidoras. La aplicación de la Resolución 253/20, que actualiza el célebre "trámite de tintas" que se usaba con frecuencia en los años de Guillermo Moreno en la Secretaría de Comercio Interior (cuando se llegó a afirmar que la tinta de los libros contenía sustancias tóxicas), parece tener como objetivo desalentar la importación de libros. Según la cantidad de libros importados (menos de quinientos ejemplares o más de quinientos), el trámite se vuelve más engorroso. Si se importan más de quinientos de un mismo título, un ejemplar debe enviarse a un laboratorio donde se certifica que no hay plomo en tinta; recién después, los libros se pueden comercializar.

Como el permiso de importación de los libros retenidos actualmente en la Aduana ya fue aprobado por la Secretaría de Comercio Interior, editores, distribuidores y responsables de las cámaras del sector se comunicaron con las autoridades de la Dirección Nacional de Reglamentos Técnicos, a cargo de Zulma Cardozo, que depende de la Subsecretaría de Políticas para el Mercado Interno de la Secretaría de Comercio Interior, cuyo responsable es el economista (y autor de varios libros) Matías Tombolini . Funcionarios de otros ministerios, sin éxito hasta el momento, intervinieron para intentar destrabar el conflicto.

" Las empresas están preocupadas y también hay que considerar el costo económico ", señala Diana Segovia, gerenta de la Cámara Argentina del Libro (CAL). Entre las empresas perjudicadas, figuran las editoriales Grupal, Nuevo Extremo, Urano, Iamiqué, Calibroscopio y Del Naranjo, y las distribuidoras Riverside, Abrazando Cuentos y Waldhuter. "Embarcamos como siempre al obtener el permiso de importación e iniciamos en enero el ‘trámite de tintas’ que habitualmente se resuelve en quince días -dice Jorge Waldhuter a LA NACION-. Aún eso no ocurrió, el barco llegó y esto nos ocasionará un nuevo daño, al tener que pagar por el depósito fiscal por todos estos días".

Silvina...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR