Las ticketeadoras, otro elemento de conflicto

Si bien se prevé que la inminente apertura de sobres de la licitación del estacionamiento medido acelere la demorada puesta en marcha del nuevo sistema, podría no ser así. Ahora, un nuevo frente de conflicto judicial se generó en torno de la instalación de las ticketeadoras, cuya adquisición se licita mediante un trámite administrativo diferente.

A última hora del viernes pasado, la firma Parkeon, que había quedado fuera de la competencia por el suministro de los dispositivos, presentó una medida cautelar en la que cuestiona la adjudicación que la Subsecretaría de Transporte y Tránsito hizo a la empresa Parkare. Y solicita que se suspenda la licitación hasta que la Justicia defina si efectivamente existió alguna irregularidad. Así lo confirmaron fuentes oficiales a LA NACION.

"Es una medida precautelar. Pondremos toda la información que se nos solicite a disposición de la Justicia. Mañana (por hoy) vamos a pedirle a la Procuración General que nos asesore sobre cómo debe continuar el procedimiento", dijeron voceros del subsecretario Guillermo Dietrich.

Los nuevos contratos del estacionamiento medido consideran el establecimiento de tres tipos de tarifa, según la zona.

La simple, por la que se abonará una cifra básica cuyo valor será constante y el residente no pagará. En tanto, la progresiva 1 tendrá un valor que aumentará de acuerdo con el tiempo de permanencia y por la que el residente pagará el 50 por ciento.

En la franja de la tercera tarifa, la progresiva 2, el costo se irá incrementando a medida que pase el tiempo, pero el residente tendrá ocho horas...