Subió la recaudación, pero menos que el gasto y la inflación

Pese al fuerte repunte del último trimestre, la suba de la no alcanzó a empardar la inflación medida por las provincias y mucho menos el aumento del gasto registrado en 2014.

en todo el año pasado, al sumar recursos por 1,169 billones de pesos, con los picos más altos en el impuesto sobre créditos y débitos en cuenta corriente (aumentó 55,8%), derechos de exportación (51,6%), Ganancias (45,5%) y, bastante más atrás, el IVA, con el 33 por ciento.

En la conferencia de prensa que brindó al anunciar los resultados, el jefe de la AFIP, Ricardo Echegaray, destacó que el resultado anual se logró gracias a "una fuerte recuperación de la actividad económica en el último trimestre", y destacó que se superó la meta en todos los impuestos, salvo en los del comercio exterior (derechos de exportación e importación). Esto pasó porque "se importó y se exportó menos que lo que tenía previsto el Ministerio de Economía", dijo, acompañado por el secretario de Hacienda, Juan Carlos Pezoa.

"Estuvimos 7% arriba de la meta presupuestaria. Y recordemos que era muy difícil de alcanzar a principios de año. Acá en la AFIP sólo un funcionario creía que lo podíamos lograr, y se logró. Todos los tipos impositivos estuvieron al alza. Y en particular, Ganancias, que es el que es mas difícil de recaudar y el que se usa más para la planificación fiscal. Ahí se ve la buena gestión", expresó Echegaray.

Lo que no mencionó Echegaray fue el efecto positivo que generó sobre las arcas fiscales la falta del ajuste del mínimo no imponible sobre el que se paga Ganancias, pese al fuerte aumento de la inflación, que, según consultoras y provincias terminó el año pasado entre 38 y 40%.

Más aún, cuando a Pezoa se le preguntó por qué no se actualizan los mínimos de Ganancias y del monotributo de acuerdo con la evolución de los precios, enojado, el funcionario respondió que "el país no tiene una alta presión tributaria, sino que acompaña el crecimiento económico".

El secretario de Hacienda también dijo, ante una pregunta de LA NACION, que no estaba "preocupado" porque el país haya pasado de un superávit fiscal del 4% del PBI en 2004 a un déficit del 4% en 2014, porque "lo importante es cómo se aplica el gasto", que subió más del 40% el año pasado.

Sin embargo, para los analistas, el problema es cómo se financia el continuo aumento del gasto, ante las dificultades que tiene la Argentina para acceder al mercado de capitales.

Arial Barraud, del Iaraf, sostuvo, como destacó Echegaray, que si...