El sindicalismo opositor va al paro apoyado en los gremios del transporte

El pragmatismo gremial empujó a , y a : como líderes del sindicalismo opositor activarán hoy el segundo de 24 horas desde que es Presidenta.La protesta, cuyas consignas centrales son "contra el ajuste y la inflación", estará guiada por el en alguno de los que habrá en todo el país. La advertencia fue lanzada por los referentes de las CGT y CTA, quienes acusaron al Gobierno de orquestar posibles ataques a taxis y restaurantes para responsabilizar a los huelguistas. "Andan diciendo que van a romper taxis para echarnos la culpa a nosotros", denunció ayer el jefe de la CGT, Hugo Moyano. Y Barrionuevo, de la CGT Azul y Blanca, alertó sobre posibles incidentes en bares "para responsabilizar a los gastronómicos".Un aviso similar dieron el Frente de Izquierda y la Corriente Clasista y Combativa, los impulsores de los piquetes, ya que ambos sectores se opusieron al paro pasivo que se dispuso inicialmente desde las cúpulas de las centrales obreras.Con los sindicatos del transporte público de pasajeros como principales aliados, Moyano vaticinó que el paro nacional tendrá hoy "una adhesión masiva, pese a los esfuerzos denodados del Gobierno". El jefe camionero se refirió así a los últimos intentos oficiales de limitar el impacto de la huelga.Contra reloj, la Casa Rosada amenazó el lunes con posibles descuentos en los subsidios al transporte público que adhiera a la medida. Además, apuró el cierre de acuerdos salariales de otros gremios para escenificar en una solicitada que la mayoría de los sindicatos del país no se sumó al paro.Desde el Gobierno se emparentó en todo momento a los organizadores de la huelga con Sergio Massa, diputado nacional y líder del opositor Frente Renovador. Por eso, se buscó minimizar la medida argumentando que es "un paro político-electoral" o que será solamente "un paro de los gremios del transporte"."¿Qué paro político? ¿De qué paro político me hablan?", planteó ayer Moyano. Y agregó, convencido: "Nadie puede negar que este reclamo es por todos los trabajadores. El Gobierno no da respuestas". A su lado, en el salón Felipe Vallese del primer piso de la sede cegetista, lo escoltaban Barrionuevo y Micheli."Será un paro que quedará en la historia de la Argentina y no es para desestabilizar a nadie, ya que se desestabilizan por la impotencia del que ejerce el poder", disparó Barrionuevo, quien, en todo momento, se mostró bromista con Moyano, su viejo...