Separan a una jueza por graves anomalías

LA PLATA.- La Suprema Corte de Justicia bonaerense consideró ayer que Alejandra Velázquez, titular del Juzgado de Familia N° 1 de Pilar, Departamento Judicial San Isidro, no podía seguir en su cargo debido a "severas anomalías detectadas en la tramitación de procesos de abrigos, guardas y adopciones". Por eso resolvió otorgarle una licencia de 90 días y encomendar la formalización de una causa penal. Se trata de una medida inusual.

En la resolución no se brindan detalles sobre las irregularidades, debido a que se trata, aún, de un caso reservado, que involucra a menores. Sin embargo, calificadas fuentes del ámbito judicial donde se desempeña la jueza confiaron a LA NACION que Velázquez, por ejemplo, les habría propuesto a asistentes sociales que buscaran en villas y asentamientos mujeres embarazadas en condiciones vulnerables para que ofrecieran sus hijos en adopción.

También se la acusó de no respetar los registros de inscriptos y de haber firmado sentencias en fechas en las que, se comprobó luego, la jueza no se encontraba en el país.

En los considerandos de la resolución, se lee: "La gravedad de los hechos enumerados en el informe elaborado por la Subsecretaría de Control Disciplinario trasuntan la posibilidad de una importante afectación a la recta administración de justicia, máxime al encontrarse alcanzados en algunos de ellos menores".

Para la Corte, esas denuncias vuelven "inadmisible la permanencia de la magistrada denunciada en el ejercicio de la función", porque "podría perjudicar o entorpecer...

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