Sentencia Nº 61778 de Superior Tribunal de Justicia de la Pampa, 2021

Fecha15 Noviembre 2020
Año2021
Número de sentencia61778
EmisorSuperior Tribunal de Justicia de la Provincia de la Pampa (Argentina)

FALLO N° 1320 - AUDIENCIA DE JUICIO DE LA SEGUNDA CIRCUNSCRIPCION JUDICIAL. Juez Unipersonal: Dr. C.F.P..

General P., abril 28 de 2021.

Legajo N° 61778
Caratulado: “Ministerio Público Fiscal c/ LARA, F.H.; CHIRINO, J.M. s/ Robo Agravado”.

VISTO Y CONSIDERANDO:
I) Que los días 13 y 14 de abril del corriente año, en la Sala de Audiencias de Juicio de la Segunda Circunscripción Judicial, con la actuación unipersonal del suscripto, se llevó a cabo audiencia de debate oral en el legajo N° 61.778, contra F.H.L., DNI N° 27.167.991, argentino, nacido el 16 de junio de 1.979 en General P., provincia de La Pampa, domiciliado en calle 411 bis N° 1857 de la misma ciudad, soltero, albañil, hijo de V. y de C.E.G. y J.M.C., DNI N° 5.267.259, argentino, nacido el 17 de marzo de 1.949, en Intendente Alvear, provincia de La Pampa y domiciliado en calle 111 N° 1585 de General P., provincia de La Pampa, soltero, jubilado, hijo de J.C. y de P.M..
Intervino en representación del Ministerio Público Fiscal, las Dras. M.V.C. y S.F., asistieron en la defensa a los imputados, el Defensor Particular, Dr. N.P. por J.C. y el Defensor General, Dr. H.F. por F.L..
II) Resultan acusados los imputados de que el día 15 de noviembre de 2020, a las 21:45 hs. aproximadamente, ingresaron a la vivienda de L.P., ubicada en calle R. Nº 565 de Q.Q., utilizando la llave que se encontraba en el postigo de la misma y, sustrajeron una cartera rosa conteniendo la suma de 50.000 pesos en billetes de 1.000 pesos. Para llegar a la vivienda utilizaron el automóvil Corsa, de la empresa de Radio Taxi Del Pueblo II, conducido por W.P.. L. logró huir del lugar previo forcejear con P. y C. fue detenido por el mismo.
III) En el alegato de apertura la Fiscal afirmó que acreditará que los imputados son los autores del ilícito que se investiga. Valiéndose de la prueba ofrecida oportunamente para acreditar su culpabilidad. Calificando los hechos como robo calificado por haber sido cometido mediante la utilización de una llave verdadera previamente hallada. (Art. 167 inc. 4º del C.P.).
Por su parte, la defensa técnica de los imputados, dijeron que acreditarán la inocencia de sus defendidos en los hechos imputados.
Los imputados no brindaron declaración.
IV) En cuanto a la producción de prueba se recibieron las declaraciones testimoniales de:
a) L.P., damnificado, declaró que el día 15 de noviembre del año 2020 estuvo todo el día afuera de su casa, recorriendo campos desde temprano. Cuando volvió a la zona pasó por el campo de la familia en M.C., donde tiene casa. Tuvo intenciones de quedarse a dormir allí porque en su casa estaba su madre con gente. Su madre le avisó que se iba a comer afuera, entonces pensó en volverse al pueblo, comer en su casa, acostarse y madrugar al otro día para trabajar. Cuando llegó a su casa estacionó la camioneta en la vereda, en la subida del garaje, medio cruzada. Vio parado un auto, un corsa. Era taxi o remis porque tenía algo redondo en la puerta. Nunca se percató de que pudieran estar adentro de su casa. Se bajó y se quedó acomodando cosas en la mochila para mirar y vio que (en el auto) había una persona adentro hablando por teléfono muy tranquilo. Se bajó de la camioneta, la cerró con llave y entró en la casa. Recorrió la cochera y cuando fue a abrir la puerta observó que estaban puestas las llaves del lado de afuera. Le llamó la atención pero no intuyó que podía pasar algo raro. Cuando abrió la puerta, la luz del living estaba apagada y a través de la puerta del pasillo y su habitación, que se veía en línea diagonal directa abierta, vio a dos personas que estaban revisando, revolviendo. Atinó a pensar que era alguien conocido que estaba revolviendo y les gritó: “che, ¿qué haces?”, advirtiéndoles para que lo vieran, porque había estado unos segundo observándolos y no lo habían visto. Ante el grito se pusieron alerta, vio que había dos personas. Uno se arrimó hasta la puerta, el declarante la terminó de abrir y se paró contra la pared-puerta. Uno de ellos salió corriendo, lo chocó, se lo llevó puesto, e hizo que el declarante se golpee contra el picaporte, la puerta y la pared. Al pasar, reaccionó tirando una piña. Quedó otro (adentro), y el declarante se retiró de la casa hasta la cochera, se ubicó en el costado, para el lado del jardín y comenzó a gritar que se vaya, que no le iba a hacer nada, pensando en que esa persona podía llegar a tener un arma y podía lastimarlo. En un primer momento no lo pensó porque no imaginó que había alguien adentro de su casa. Vio que salió un hombre grande, que ni siquiera corría, iba trotando como si no pudiera correr. Al ver que salía tan tranquilamente como si nada, lo siguió detrás preguntándole “¿qué haces?, ¿qué hacen acá?”. En ese momento el damnificado estaba en shock y no se daba cuenta de lo que hacía. Al mismo tiempo que le preguntaba le decía “pará, pará”. En un momento pudo frenarlo y llamó a la policía. Pasó muy poquito tiempo entre que llamó y llegó la policía.
Dijo no recordar cómo frenó al imputado, no sabe si terminó empujándolo y aquel se tropezó y cayó contra el piso. Que estando en el piso se le apoyó arriba con una mano y con la otra llamó a la policía. Algo así. No se detuvo voluntariamente, tuvo que empujarlo, y al ser un hombre grande tropezó y se cayó.
Continuó diciendo que mientras el declarante estaba parado en la puerta, el primero que salió corriendo lo chocó para poder pasar, y siguió corriendo y gritando “Arrancá, arrancá!”. Se subió al auto, el Corsa que era un remis, lo puso en marcha en ese instante y arrancó. Se subió como acompañante.
A causa del forcejeo resultó con una lesión contra el picaporte de la puerta, hematomas en la zona de la cadera y dolor en la mano que le duró un par de semanas. En el Hospital de Q. Q. constataron sus lesiones y extendieron certificado. A exhibición de certificado médico firmado por la Dra. J.L., el declarante reconoció que refiere a sus lesiones.
Relató que le sustrajeron 50.000 pesos de su madre, de la habitación de ella. Primero revolvieron esa habitación y después estaban revisando la habitación de él. Que además en la casa había unos 300.000 pesos del declarante originados por una venta de cereal que se había efectuado el miércoles de la semana anterior.
Manifestó no saber por qué estaba la llave puesta al momento de llegar a su casa. La misma fue sacada del lugar donde habitualmente la esconden, atrás de una persiana cerca de la puerta.
A exhibición de fotografías explicó que es el frente de su casa y que había estacionado su camioneta en diagonal, tapando la entrada. Indicó dónde estaba parado el auto, la ventana donde guardaban la llave y la puerta con la llave puesta. Señaló la habitación donde estaban los imputados, agregando que estaban revisando del otro lado de la cama con la luz bien de frente. Adujo que en su habitación estaban los 300.000 pesos. Mostró en las imágenes la puerta del pasillo que conduce a mano izquierda a su habitación, a la derecha a la de su mamá, y enfrente el baño. Se observaron las habitaciones. Ubicó la repisa donde se encontraba el dinero en su habitación, a plena vista. En la habitación de su madre indicó dónde estaba el dinero que se llevaron, y dijo que le mismo estaba en un sobre, no de papel sino similar a cartera. Ese dinero era la recaudación del negocio de ropa indumentaria de su madre.
Contó que su casa está ubicada frente al Ferrocarril y un terrero de 80 metros de frente lindantes con el Ferrocarril. Detuvo al hombre en ese terreno, unos 10 metros adentro del cordón. Dijo que el mismo trotaba en diagonal yéndose para el lado del ferrocarril. Al no parar lo empujó, y al caer al piso llamó a la policía. No recuerda cómo estaba vestido. Al frenarlo y darse cuenta que le habían robado llamó a la policía. La policía tardó poco tiempo en llegar.
Con respecto a la otra persona imputada, pudo verlo con la luz de la habitación y desde un mejor ángulo que el que se observaba en la foto. En el momento que lo chocó no pudo verlo porque estaba la luz apagada en esa zona. Los pudo observar bien cuando estaban adentro de la habitación.
Respecto de la Rueda de reconocimiento mencionó que fue junto con la fiscal y dos personas más por un ascensor. Que mostraron cuatro personas de las cuales indicó a quien le parecía haber visto y lo chocó en el pasillo.
A exhibición de foto de la diligencia dijo no recordar bien, pero cree que señaló el Nº 4. A exhibición de acta de Rueda de reconocimiento reconoció su firma en el documento.
Contestó que llegó a su casa aproximadamente a las 9:20, 9:25 hs. de la noche. Cuando entró se paró en la puerta y lo chocó alguien, que es el que intentó reconocer en la Rueda de reconocimiento. Ese salió. Seguidamente se retiró y salió otro, que lo pudo parar y llamar a la policía. La primera persona que se fue, al salir lo chocó, salió corriendo, se subió al taxi/remis/auto y se retiró de ahí. Se subió al mismo auto que vio cuando llegó a su casa. Respecto del color del auto dijo que no era de un color llamativo como rojo o verde, era más bien de la gama del blanco o gris.
Cuando se refirió al sobre, especificó que es como una cartera de mujer pero más finito y reducido, de 25 por 15 cm., rectangular y con un cierre arriba. No encontraron ese sobre después. No tiene conocimiento si se lo encontraron a alguno de los imputados. No vio al imputado irse con el sobre en la mano.
No recuerda cómo estaban vestidas las personas, que la habitación donde estaban mide aproximadamente 3 por 3,50 o 4 metros. Siempre estuvo parado en la puerta de entrada de su casa, nunca la pasó hasta que salieron los dos sujetos.
b) M.A.W., sargento de policía, declaró que al momento del hecho se encontraba de guardia junto al Sub Oficial Principal Borgna, cuando su compañero en la comisaria recibió un llamado del ciudadano P., L., aduciendo que le habían entrado a su vivienda y que tenía a una persona reducida frente a su domicilio, un predio de ferrocarril. Estaban a pocas cuadras por lo que acudieron inmediatamente al lugar...

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