Sentencia Nº 39095 de Superior Tribunal de Justicia de la Pampa, 2019

Año2019
Número de sentencia39095
Fecha01 Abril 2019
EstatusPublicado
EmisorSuperior Tribunal de Justicia de la Provincia de la Pampa (Argentina)

FALLO Nº 1075

AUDIENCIA DE JUICIO

SEGUNDA CIRCUNSCRIPCIÓN JUDICIAL

DR. H.A.P..

JUEZ UNIPERSONAL SUBROGANTE.

__________________________________

General Pico, 1 de abril de 2019.

VISTO: Este legajo Nº 39095, caratulado: "MINISTERIO PUBLICO FISCAL c/S.C.A.E.s/ABUSO SEXUAL SIMPLE AGRAVADO":

DE LOS QUE RESULTA: Que en mi carácter de Juez de Audiencia de Juicio Subrogante, de la Segunda Circunscripción Judicial de la Provincia de La Pampa, en ejercicio Unipersonal de la magistratura (arts. 34 inc.1º y 387 C.P.P.) he de sentenciar en este procedimiento de Debate Oral, celebrado el día 25 de marzo del corriente, en la sala de audiencias Nº 1 de este edificio judicial, contra el Sr. C.A.E.S., D.N.I Nº 26.XXX, nacido el día 7 de septiembre de 1978 en YYY Provincia de Buenos Aires), domiciliado en calle XXX de esta ciudad, hijo de C.E.y A.A.; por la presunta comisión del delito de Abuso sexual simple agravado por haber sido cometido por el encargado de la guarda como delito continuado (art. 119 1er. y último párrafos, en su remisión al 4to. párrafo inc. b) del C.P.). S. se encuentra asistido en esta causa por el Defensor Particular Dr. F.D.G. y representa al Ministerio Público F. de la Provincia de La Pampa, la F. Dra. I.S.H..

CONSIDERANDO: Que, en su Alegato de apertura del debate la F. acusó a S., manifestando que intentará acreditar la responsabilidad penal del acusado por los siguientes hechos: “Sin poder establecerse las fechas exactas, entre el 2014 y el 2016, cuando la joven B.L.F., actualmente de 15 años de edad, se quedaba a dormir en la casa de una amiga (C.S.), en calle XXX (esquina XXX) de la ciudad de XXX -La Pampa-, el imputado, quien residía en dicho domicilio, abusó sexualmente en reiteradas ocasiones de la menor amiga de su hija.

Los hechos eran llevados a cabo en los momentos en que el imputado se levantaba para ir a trabajar a las 04:00 horas aproximadamente e ingresaba a la habitación (sector de la cocina) donde la víctima dormía junto con su hija, se bajaba el pantalón y el calzoncillo, le agarraba las manos o los pies a B. y hacia que se los pasara por su miembro; estimándose que el último hecho habría acaecido en diciembre del año 2016 cuando B. contaba con 13 años de edad”.

La calificación legal pretendida es la de: Abuso sexual simple agravado por haber sido cometido por el encargado de la guarda como delito continuado (art. 119 1er. y último párrafos, en su remisión al 4to. párrafo inc. b) del C.P.).

En su Alegato de apertura, el Defensor solicitó la absolución del imputado en base a que los hechos no sucedieron de la manera en que eran denunciados por la damnificada. Para el caso de que se considerara que los hechos ocurrieron de la manera denunciada, entendió que no correspondía aplicar la agravante de la guarda.

Cedida la palabra al imputado, declaró que los hechos no eran como se lo acusaba. Que si bien B. se quedaba a dormir en su casa, manifestó que él pertenecía a una iglesia evangélica y que cada mañana el oraba, tanto por ella como por los suyos. Que si bien en algún momento había estado al lado de la cama de la damnificada, la cual compartía con su hija, reiteró que la intención era orar por ella, porque era la que más lo necesitaba ya que estaba como desamparada y que la oración de la mañana es más fuerte que la de la noche. Respecto a esto, expresó que ni su madre, ni su padre se hacían cargo de ella y andaba de un lado para el otro. Que como cristiano, cada mañana oraba tanto por ella como por su familia. Que lo hacía antes de salir para el trabajo y para agradecer por cada día.

Manifestó que B.le había contado que en la casa de la mamá no se quería quedar porque veía muchas cosas feas. Que la mamá muchas veces llegaba ebria o andaba siempre en la joda. Que siempre llegaba con un novio más joven y que hacían cosas feas. Que todo esto se lo había contado B. a su familia y que por eso no se quería quedar en la casa de su mamá. Que en la casa del papá tampoco se quería quedar los fines de semana porque la agarraban de niñera, la hacían quedar con algún hermanito más chico mientras que, el papá y la novia nueva, salían. Que por todo ello, B. decidía quedarse en su casa hasta que pasó todo esto.

Refirió que B. les había pedido muchas veces que la adoptaran. Que ellos la querían como una hija más.

Expresó que hasta hoy en día no encontraba el porqué de esto. Que no sabía si ella había mal interpretado algo en algún momento. Que la había tomado de la mano y que había orado por ella cada mañana, como lo ha hecho por los suyos.

Explicó que, como cristiano, la oración de la mañana era como que tenía más poder que la de la noche. Que a la noche uno ya llegaba más cansado y decía dos o tres palabras. Que a la mañana era la oración que más mueve.

Manifestó que creía que D. había obrado en ella y en su familia porque, de una manera u otra, hoy en día los había unido.

Ahora bien, dando inicio a la rueda de testigos, en primer lugar depuso la abuela de la damnificada, la Sra. M.A.M.. Declaró que tenía una nieta (B.) que actualmente tenía 15 años. Que desde que tenía más o menos 7 años era amiga de la hija del imputado. Que se conocían e iban a la misma iglesia. Ellas eran amigas, se visitaban y B. iba a dormir a veces a la casa de S. Que no iba siempre, pero iba, como por ejemplo, fines de semana. Que luego se habían ido un tiempo a vivir a TTT y, cuando venían, B. también se quedaba a dormir en la casa de S.

Que según el imputado y su mujer, eran como la familia para la nena, la querían muchísimo y no dejaban de decirle, tanto el imputado como la esposa, que se quedara, que la querían como a una hija, que la atendían y la cuidaban. Refirió que las nenas eran muy amigas. Que, aparentemente, estaban todos en la misma iglesia y nunca se había visto nada. Que ellos eran un matrimonio normal con dos hijos, no mostraban nunca ninguna conducta rara, hasta que en el 2017 B. no daba más.

Manifestó que previo a esto, B. había tenido unos episodios, por ejemplo unos cortes en la muñeca, muchísimos dolores de estómagos. Que la habían hecho tratar y no sabían qué hacer porque, en realidad, era una nena muy sana, nunca había tenido problemas. Explicó que B. no podía hablarlo y que luego, le había dicho que no podía decirlo porque ellos habían sido buenos con ella, le habían permitido dormir en la casa, siempre decían que la querían mucho, que la iban a proteger, que la iban a cuidar. Que no había podido hablar por eso.

Aclaró que B. le contó que cuando dormía ahí con la hija de S., el imputado se levantaba a las 04:00hs. para ir a trabajar a YYYY y, en ese momento, se bajaba los calzoncillos y pretendía que B. le tocara, o con sus manos o con sus pies, sus genitales. Que también les contó que ella trataba de hacerse la dormida, trataba de zamarrear a la nena que estaba al lado pero que, aparentemente en la casa, nadie escuchaba, todos tenían el sueño muy profundo.

A preguntas de la F.ía, contestó que dentro de la iglesia había un grupo de nenas entre las cuales estaban, la hija del imputado, B. y otra nena, F., que era la nena de V.. Que eran todas amigas y se visitaban.

Que B. lo había contado primero una noche en que se había quedado a dormir en la casa de V. con la nena. Que estaban mirando una película donde justamente había acoso y la chica se suicidaba. Que se ve que B. había encontrado ese momento para contarlo. Que entonces le contó todo a esta chica, V. y ella le dijo que fuera y que le contara a su abuela. Explicó que en ese momento, B. estaba viviendo la separación de los papás y la cosa no estaba bien. Que por esto era que B. estaba mucho con ella y, a su vez, que no se lo había contado porque, como tenía muchas cosas, no quería recargarla.

Declaró que B., al otro día de quedarse a dormir en la casa de B., después de un partido de hockey, se lo contó. Manifestó que, tras enterarse se quería morir, porque era una familia que lo único que decían era que lo hacían era cuidar a la nena.

Contestó que B. vivía con ella desde los 10, 11 años. Que las veces que B. quería ir a dormir a la casa de C., cuando estaban en Pico, el arreglo era entre ellas. Agregó que B. le decía “mi hermana”. Que luego ella hablaba con la mamá de C. para ver si no molestaba, si realmente podía ir. Que después, cuando venían de YYY, ella hablaba con ellos a ver si la nena se podía quedar. Que generalmente la mamá de C. y ésta le pedían que se quedara.

Manifestó, que cuando se veían en la iglesia y B. lo veía al imputado, iba y lo saludaba normal. Que luego, ella le había preguntado, cómo era que cuando lo veía lo saludaba normal, contestándole B. que no quería hacer nada distinto para que nadie se diera cuenta, porque sentía como un agradecimiento a la mujer de S.

Expresó que después de que B. le contara lo que había sucedido, declaró que fue hasta la casa del imputado. Que B. había pedido acompañarla para que, si S. le decía que no, que se lo dijera en la cara. Que ahí ya había tomado más coraje. Agregó que en otro auto había ido el papá de su nieta. Que en el lugar estaban el imputado, la hermana y su esposo y la mujer del imputado. Que cuando estaban discutiendo llegó el padre de B. y empezó a gritar. Que un médico que estaba atendiendo a una señora en una ambulancia, en la casa de al lado, fue el que pidió que llamaran a la policía. Que sino ellos después iban a ir a hacer la denuncia. Que luego llegó toda la policía al lugar y el imputado se escapó.

H. exhibido una denuncia, reconoció su firma en la misma, como así también su número de teléfono.

Consultada por la Defensa, respondió que cuando B. había comentado la situación, sus padres ya estaban separados.

Declaró que B. no pedía ir a lo del imputado, sino que la invitaban a ir. B. después le había dicho que siempre pensaba que él, esa noche no lo iba a hacer. Que no se iba a levantar y se iba a bajar los calzoncillos como lo hacía siempre. Agregó que en el 2017 a mitad de año, ella había venido de YYY y habían ido a la casa de ellos invitados por la esposa del...

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