Scioli, Macri y Massa, al desnudo en sus spots

La imagen de la semana no fue la exquisita asistencia de Viudez a Alario y la definición de éste en el gol que le aseguró a River la clasificación a la final de la Libertadores. Tampoco el enternecedor gesto de Rodríguez Larreta de pedirle a la hinchada de Pro, durante el festejo de su triunfo por penales frente a Lousteau, que aplaudiera cuando él nombraba a Macri. No. La imagen que quedó en las retinas de todos fue el primer spot de campaña de Scioli. Cuánta belleza. Cuánto mensaje. Me pareció súper original mostrar el norte y el sur del país, el campo, las Cataratas, una fábrica, una escuela, la bandera flameando, gente que ríe. Y la voz de nuestro candidato diciendo que el mundo se muere por venir a vernos. La pucha, qué creíble es Daniel. Ese cuadro sobre el final, compartido con la señora, tiene tonalidades épicas. La idea era ponerlo también a Zannini, pero ustedes saben que el Chino es cultor del bajo perfil. Y lo bajaron.

Estoy feliz porque todavía tendremos un par de semanitas más de spots de todas las listas. Me encanta ver a los candidatos mostrándose tal como son, sin impostar nada, sin promesas vacías. Qué lindo verlos abrazar gente y que la gente los abraza. Re tierno. Qué lindo que en todas las tandas aparezcan dos o tres, o veinte, contándonos las maravillas que van a hacer si los votamos. Y lo que más me gusta es que detrás de esas piezas publicitarias hay ideas, hay propuestas. Nada de hacer concesiones al marketing. Cada mensaje contiene un plan de gobierno hecho y derecho. Por ejemplo. Scioli muestra un programa basado en su ideología, el sciolismo, corpus que contiene un poco de menemismo, duhaldismo, nestorismo, cristinismo y obedientismo, fuentes filosóficas en las que ha abrevado. Y promete no contaminar ese acervo con ideas propias. A Macri no le gusta vender globos, ni siquiera amarillos. Los regala. Se presenta como el candidato del cambio. Si lo que va diciendo no pega en las encuestas, lo cambia. El que lo convenció de virar hacia un discurso filokirchnerista es el librepensador ecuatoriano Durán Barba, un recaudador serial que tiene un sueño: de grande quiere ser Durán Barba. El último ejemplo es Massa, con un programa muy original. En general los candidatos son autorreferenciales. Sergio no. Sergio sólo habla (mal) de Scioli y de Macri.

Como tengo amigos en todos los equipos de campaña, he podido hacerme de los próximos spots que los máximos candidatos están por poner en el aire. Aquí van.

Scioli. "Ustedes ya...