La Scaleia figura como accionista en una firma offshore de Panamá

Con más de 20 denuncias penales en su contra, el ex titular de IOMA Antonio Atilio La Scaleia es investigado por la Justicia como parte de un supuesto sistema de drenaje de fondos de la gestión de Daniel Scioli. Pero también por su presunto enriquecimiento ilícito y lavado de activos por figurar como accionista de una firma offshore de Panamá.

La Scaleia se constituyó en accionista de la firma IT Invest Group Technologies SA, de Panamá, en abril de 2014. No entró solo en el negocio: también Daniel Burgos, ex jefe de gabinete del IOMA y su segundo en la obra social, adquirió papeles de esa sociedad offshore. Así consta en los mails internos de Mossack Fonseca a los que accedió LA NACION en el marco de la investigación de los Panamá Papers impulsada por el Consorcio Internacional de Periodistas de Investigación (ICIJ).

Según pudo conocer este medio de fuentes que gestaron el negocio, IT Invest Group Technologies SA fue creada para realizar venta digital de publicidad en distintas plataformas. Entre otros productos, ofrecían una aplicación móvil del fútbol bautizada Friendball. ¿En qué consistía? Quien descargaba el programa podía volcar sus preferencias futbolísticas y conocer las novedades de su equipo con mensajes patrocinados que -esperaban sus creadores- reportarían ganancias millonarias a los dueños del producto.

La idea era desembarcar con el proyecto en distintos países para comprar y vender publicidad. Para recibir esos dividendos, en junio de 2012 crearon la sociedad offshore en Panamá, donde reinan el secreto bancario y las ventajas tributarias. "Se hizo allí por las trabas comerciales y el cepo que existían en la Argentina", explicaron las fuentes.

Entre los Panamá Papers se encuentra una planilla con las gestiones, paso a paso, que los empresarios argentinos hicieron para la firma panameña. La sociedad fue adquirida el 26 de junio de 2012 con el objetivo de que fuera "portadora de acciones de otras sociedades". Luego, realizaron tratativas para incorporar nuevos socios.

En abril de 2014 se celebró una junta directiva para emitir 17 nuevos certificados de acciones a distintos conocidos que se interesaron por el negocio. Allí entraron en el juego La Scaleia y Burgos: adquirieron dos acciones por 35.000 dólares cada uno. Mossack Fonseca, incluso, elaboró un world check del ex titular del IOMA, es decir, un estudio de los antecedentes de las personas interesadas en operar offshore. Pero lo admitió a pesar de tratarse de una persona...

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