El retorno del crédito hipotecario

Desde que, a mediados de la década del cuarenta, la inflación se hizo presente en la Argentina, el crédito a largo plazo para la compra de una vivienda fue perdiendo relevancia. La aspiración de contar con una vivienda propia mediante una pequeña suma inicial seguida de cuotas similares a un alquiler pasó a ser una ilusión. Mientras en gran parte del mundo esto es posible, en nuestro país no lo es, a excepción de que el gobierno otorgue créditos fuera de las condiciones de mercado. Éste es el caso del plan Procrear, aunque como en todo programa subsidiado surgen inmediatamente los límites. La reciente aparición de créditos hipotecarios de largo plazo con el capital indexado fuera del plan Procrear constituye una novedad auspiciosa.

Los fondos que puedan emplearse para el crédito hipotecario deben provenir de los depósitos que las personas o empresas realicen en bancos, sociedades de ahorro o fondos de inversión. Quienes depositan su dinero a plazo exigen un interés acorde con el riesgo y con la previsible desvalorización de la moneda con que ahorran. Con alta inflación, el riesgo se potencia y además crece en proporción al plazo del depósito. Por eso en países de economías inflacionarias no sólo se reduce el monto del ahorro y de los depósitos, sino que además se acortan los plazos de los depósitos y préstamos. Las tasas de interés que deberán reconocerse a los depositantes tendrán que ser nominalmente tan elevadas como lo sea la inflación esperada. Por esta razón, cualquier banco o entidad que se fondee con depósitos del público sólo podrá otorgar préstamos de corto plazo y con altas tasas de interés. Éstas no pueden ser justamente las características del crédito para la vivienda.

La moneda y su estabilidad son cuestión relevante en la sustentación del crédito hipotecario. El peso argentino no está reconocido por los propios argentinos como reserva de valor. Se prefiere ahorrar en moneda extranjera, particularmente en dólares. Sin embargo, no se ha desarrollado tampoco el crédito hipotecario en esta moneda. Ello se debe a que la historia muestra frecuentes intervenciones regulatorias sobre la moneda extranjera. La gente sólo cree en el dólar billete conservado en una caja de seguridad o depositado en cuentas en el exterior. Desconfía de depositar sus dólares en una cuenta corriente en un banco local.

En 2014, el gobierno de Cristina Kirchner anunció y comenzó a operar el plan Procrear, destinado a financiar la compra o construcción de una...

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