Resplandor de una mente sin recuerdos

"En la calle me cruzo con una mamá que le dice al hijo: «Mirá, Nicolas Repetto». Y el nene no sabe quién soy. Ella creció conmigo en la tele, pero el pibe no tiene ni idea. Una generación menos." Nicolás Repetto no puede disimular la sonrisa. Lo alivia la falta de reconocimiento del público más joven, algo que a otra persona con una trayectoria televisiva como la suya le parecería una tragedia. Dice "una generación menos", como quien se saca de encima un examen de los muchos que le quedan para dejar de ser famoso. Suena raro que ése sea el objetivo de alguien que pasó casi toda su carrera profesional frente a las cámaras como una de las caras más reconocidas de la conducción y la producción. Y más teniendo en cuenta que ahora está de vuelta en la pantalla chica para, como el año pasado en Farsantes, hacer de alguien que no es él. Tal vez sea eso lo que más le interesa de su personaje en Guapas, que Leonardo Zabala, el nuevo dueño del canal en el que trabaja el personaje de Isabel Macedo, no es él."Mi meta nunca fue mantenerme en la popularidad máxima para siempre. Nunca fue ése mi sitio. Además, malas noticias para los que buscan eso: es imposible. Ese tipo de fama dura una generación y media como mucho. Y se acaba. Por más pena que nos dé, los chicos de hoy no saben quién es Olmedo.No tienen recuerdos con él, no se emocionaron con él como lo hicimos nosotros", sentencia Repetto, que tiene autoridad de sobra para hablar de lo pasajero y cambiante que puede ser el favor del público. Ese que nunca entendió del todo su afán de dar un paso al costado cada tanto, de correrse de la luz de los reflectores para volver cuando le diera la gana."Queda más la imagen del año sabático, del traje de neoprene en Punta del Este, que el recuerdo de todo lo que hice, de los años de trabajo, de la obra", se lamenta el conductor, pero no demasiado. Es que cuando se le habla de esa obra, del pasado, de lo que hizo, él es el primero en huirles a las revisiones históricas. No se acuerda cuántos años pasaron desde que trabajó en los fundacionales Semanario insólito y La noticia rebelde y cuando se le sugiere que podría escribir un libro muy interesante con toda su carrera televisiva empezando desde allí la respuesta es un rotundo no. Nunca se le cruzó por la cabeza y hasta la sugerencia parece inquietarlo."Quizás haya que escribir ese libro, pero no soy la persona indicada para hacerlo. No me interesa mirar para atrás, tal vez sea para escaparle al paso del tiempo y tal vez porque...