Razones de un fútbol enfermo Punto límite

El abrazo de Franco Niell no puede tapar el bosque. El gran gesto del delantero de Gimnasia, custodiando a un desprotegido Andújar para que sus propios compañeros del Lobo no le peguen más puntapiés, fue apenas una luz en medio de la oscuridad. El fútbol argentino está enfermo y el problema no se remite a colores o camisetas. El clásico platense protagonizó el último escándalo, pero antes fueron Boca y River. Y antes? Lo cierto es que enero no sólo fue un mes de súper acción futbolera, con amistosos para todos los gustos. También dominaron los desbordes, los excesos de conducta de los futbolistas. Hay una estadística visible: hubo 14 rojas en 12 partidos, la mayoría por acciones violentas, de esas que tienen un alto riesgo sobre el físico del adversario. La última fue la de Alvaro Pereira (Estudiantes) sobre la cabeza de Facundo Oreja (Gimnasia), jugador que debió ser retirado en ambulancia del estadio José María Minella. Pero hubo otras fuera del límite, como la de Silva (Boca) sobre Mercado (River), la de Asad (Vélez) ante Pol Fernández (Godoy Cruz), el codazo de Blanco (San Lorenzo) a San...