Prince: una fuente inagotable de novedades

A poco más de un año de la muerte de Prince no caben dudas de que fue un artista celoso de sus bienes personales. Semanas antes del primer aniversario de su fallecimiento, su estudio de Paisley Park convertido en museo podía ofrecer tres o cuatro muestras totalmente diferentes en un mismo año ya que había más de 7000 objetos dignos de ser expuestos en el más reciente inventario. Otro de los secretos develados fue su caja fuerte, que resultó una caja de Pandora repleta de grabaciones. Porque Prince también fue celoso de la propiedad intelectual de su obra y de los derechos discográficos que llegó a conseguir sobre ella. Son conocidas sus viejas disputan con compañías de discos y sus más recientes pleitos con plataformas de música digital. Pero da la sensación de que como ya no está en esta tierra para ponerle freno con su cuerpo menudo ni su carácter fuerte a la codicia ajena, todo lo que le perteneció es materia prima de un gran negocio. Desde hace un tiempo su famoso disco Purple Rain está...