Premio a los mejores del campo

En una noche a pura emoción, se conocieron ayer los ganadores de la novena edición del Premio a la Excelencia Agropecuaria LA NACION-Banco Galicia.Se trata de una distinción que, de manera ininterrumpida desde hace nueve años, distingue las distintas actividades vinculadas con la producción.En quince categorías, el premio reconoce a los hombres y mujeres del campo que innovan en este sector, motor de la economía del interior del país. Pero que, además, apuestan a la excelencia, el compromiso y el trabajo.En esta oportunidad, hubo 180 postulantes. El jurado estuvo integrado por Fernando Vilella, de la Facultad de Agronomía de la Universidad de Buenos Aires (UBA); Gustavo Oliverio, de la Fundación Producir Conservando, y Rodrigo Bunge, consultor."La innovación supone asumir riesgos. De modo que se encuentra implícita en estos premios una distinción al coraje personal y empresarial. La innovación suele partir de un pensamiento crítico, que no se conforma con seguir mansamente lo establecido y, en algunos casos, se origina en un pensamiento utópico que terminó corriendo, para beneficio general, las fronteras preexistentes de la ciencia y de la técnica", expresó José Claudio Escribano, director de SA LA NACION.Con el restaurante central del predio de la Sociedad Rural Argentina (SRA) colmado por 300 invitados, el momento de mayor algarabía fue cuando se conoció el Premio de Oro, que obtuvieron el Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA) y la Universidad Nacional de San Martín. Ambas instituciones, de carácter público, ganaron por su trabajo realizado para la obtención del primer bovino bitransgénico del mundo, que dio lugar a una leche maternizada.Nicolás Mucci, especialista del INTA Balcarce, uno de los ganadores del Oro con Adrián Mutto, de la Universidad Nacional de San Martín, expresó: "El reconocimiento a esto es valedero; te da mucho empuje".Por una esperanzaAl referirse a la novena edición de este galardón, Escribano señaló que los premiados y postulantes representan "una gran esperanza" vinculada con el sector. "Todos ellos abonan las razones de una gran esperanza. Es la esperanza fundada en lo que el campo y las industrias y servicios asociados seguirán dando al país y, también, en lo que el país testimoniará como agradecimiento al campo algún día por lo que éste le ha dado, sobreponiéndose siempre a las inevitables adversidades de la naturaleza y, a veces, a las adversidades mucho menos comprensibles de la necedad humana", afirmó el...